PRINCIPALES TRABAJOS
DEL
A„TOR
Origen,
transformaciones y fin de los cisticercos.— "fieristade cienciasmf;dicos.-1,s7. Números 3. 6. 7 y 8.)
Nuevo
aparato
para la transfusión de la sangre, del Dr. Coll yPujo!.
nerista de ciencias 31-édicas.-1878.—Núms. 11 y 12.-1879.—Náms. 1 y
4.)
Acciónfisiológica
del café.— 1:g:isla de Ciencias Médicas.-1879.—Núm.4.)
Digestiones
artificiales.— 1:ceislade Ciencias Médiras.-1880.—Núm.2.1
Acción
fisiológica
del alcohol.— Boletín Médico escolar.-1879.—Núm.1.)
Hermafrodismo. Poieti Médico escolar.--1880.—Núms.
7,
8 y9.)
.Reumatismo infantil.-- Vd ira Catalana.-1881.—Núms.
2,3
y4.) Acción tóxica de las sales de cobre.—bldependencia
Médica.-1881.—Mtmeros 26 y
27.)
Anatómíay
Fisiología
patológicas
de latetania.—:Vaccia
médica ('ata.
lana.-1881.—Núm.
21.)
Laveran y Teissier.—Noel-oselementos de
Patología
y Clínica Médica Ver siónespanola
por el Di.. 1..Formiguera
yMiguel
A.Fargas..
ANATOMÍA
NER\
D. MIGUEL A. FARGAS
ROCA,
LicenciadoenMedicinayCirugiaporoposición;exAlumno interno
pensionadoypremiado;Profesor libre de Anatomia y operaciones; Director demuseos anatómicos;
Director de una clinica de enfermedades demujeres; etc., etc.
BIBLIOTECA DE LAUNIVERSITATDE BARCELONA
1 11 11 1 11
0700676967*44-ILITSTRAD,4,V61¦T
64GR"B_ADOS
,MEDIc.N4
5 2»EDICIÓN
BARCELONA
IMPRENTA
DE
JAIME
JEPIS
Y
ROVIRALTA
CALLE DEL
NOTARIADO,
NÚMERO 91889
1?.17I.o
31)
.0 Ora D e44
Ci y •'abz
'4)recA
el--PREFACIO.
Al invitarme los Directores de
la Gaceta
Médica Catalana
á
que
hiciese
algun trabajo
para dicho
periódico,
y
convencido de que
el
tratar
de
asuntos
útiles
y
de actualidad
estan bueno
y
mejor
que el hablar
de asuntos
nuevosy
originales, pensé
escribir
artículos
sueltos
sobre determinados
puntos
de la
Anatomía de los
centros
nerviosos. Hé
aquí
el
motivo y
el
origen
de
este
trabajo.
Aquel primer pensamiento
tomó mayores
proporciones,
y
lo
que debian
serestudios aislados
é
independientes,
enlos cuales
nohubiese ni
regla
de
exposicion,
ni
plan descriptivo,
vino
á
convertirse
en unpequeno conjunto algo
ordenado
y
metódico.
A esto
sedebe
el
que
pueda presentarlo bajo
la
forma
de Mono
grafía.
Dado
suorigen
y
su.carácter,
y
dado el
pensamiento
que
meha
guiado,
bien
še
comprende
que
nohe
pretendido
escribir
unaobra de Anatomía sobre los
centros
nerviosos.
Tampoco
meha
podido
servir
de
incentivo
la
exposicion
de ideas
originales,
ni de
investigaciones especiales propias;
ni
siquiera
se meha
ocurrido llenar
unvacío,
ni
dar
publicidad
á
cosasdesconocidas
ó
ignoradas.
Unicamente
escribir,
conla
mayor concision que
meha sido
posible,
lo
que á
mi
noticia
ha
llegado
sobre este
punto
de
la
Ciencia
y
que
lo
considero
de
utilidad
y
aplicacion;
y si
borrando
mi nombre delante
de
los
hechos
eneste
opúsculo
consignados, pueden
los
mismos,
enla
forma que
los
expongo,
será
álguien provechosos,
he
de
quedarme
de
sobras
complacido.
Algunos puntos
los toco
muy
á la
ligera,
otros los omito: esto
obedece,
enmás ó
enménos,
al
criterio
que
enla
Introduccion
Barcelona, 1882.
— VI —
ber
acertado
endar mayor
amplitud
á
lo útil y
enrecortar
lo
supérfluo.
Aun dados los estrechos
y
modestos límites del
plan
que
mepropuse,
quizás
no mehubiese
decidido á
ponerlo
enobra,
si
el
Dr.
Formiguera
no mehubiese brindado
con sucolaboracion para
ilustrar el
opúsculo
conalgunos grabados,
de los
cuales, siempre
que
no seanoriginales,
seindicará
al
pié
suprocedencia;
y
tengo
tanto
mayor
gusto
enconsignar
lo
muy valiosa que
meha sido
sucooperacion,
encuanto á la
condicion de
ser unexcelente di
bujante,
reunela de
serbuen
anatómico,
conlo
cual
meha alla
nado muchísimas
dificultades.
_A_I\T_ArTOMLA,
DE
LOS CUTROS
NERVIOSOS.
INTRODUCCIOX.
Los
centros nerviosos sonalgo
más que unórgano,
más que unapa
rato,
más que unsistema;
son casi por sí solos uncomplejo
yadmirable
organismo,
unconjunto armónico,
en que cada una desuspartes
desem
pena
unpapel
deprimer
órden;
son susfunciones
tandelicadas
y tansútiles,
que su esenciaescapa
hoy
porhoy
átoda
concepcion
del huma
no
espíritu.
Toda
teoría,
todahipótesis,
todaelucubracion,
encuentrasuescollo al convertirse en
intérprete
dealgunas
de susfunciones;
porellas,
elentendimiento humano
cae en unabismo,
larazonpausada
yfria
llega
alabsurdo,
laimaginacion
exaltada
yfantástica delira.
El misterio
queenvuelve
lasfunciones de los
centrosnerviosos,
más
misterioso
antes quehoy, depende
en sumayor
parte
de lafalta
de conocimientos anatómicos.
Porque
laFisiología
sin laAnatomía,
es comomariposa
que vuela errante sin encontrar florendonde
posarse:deslum
bra
yseduce
por labrillantez
de suscolores y
suságiles movimientos,
pero
produce
elvértigo
por sucontinuo revoloteo
y susinconstantes
y
fugitivas
posturas.
Es
elgenio
de laAnatomia
enboca
deLetamendi,
quien
dice:
«laFisiología
en mi seno seengendró
y á élretorna,
yaun en sumayor
independencia,
yosoy
el nombre desu
orácion,
yo el su-geto
de suspredicados,
yo elobligado principio
y finde
sus pensamientos.»
El
hombre
esimpaciente
pornaturaleza,
y mal se
avienen
la monó
tona y
rigurosa
sucesion
de loshechos
con su ávido yturbulento deseo
de saber:
tal vez por elnatural
disgusto
de
que en suvida
corta y
finita,
no
puede
abarcar
lainmensidad
—
8
—deun
hombre que espera
óprevé
un sucesopara el
porvenir,
estuviera
el
adelantar
lasucesion
de losdias,
lossiglos
se nosvendrian encima
conlacreciente
rapidez
con que unapiedra
cae al centro de la tierraatraida por
lafuerza
de lagravedad.
No se
resigna
con el severo éimperturbable
curso de loshechos,
y
orgulloso
por
temperamento,
creeque
aguijoneando
sumente ha desuplir
lafalta
deobservacion
y deexperiencia.
Así es comoconstruye
,esas torres
babélicas
sobrecimientos
deneblina,
que
evaporándose
bajo
la más ténuecontingencia dejan
derrumbar
eledificio,
hiriendo
en
su
desplome
á cuantoscometieron
laimprudencia
de
cobijarse bajo
él.
!Cuántas
cosasaprendemos hoy
enMedicina que debemos
olvidarmanana!
!Cuántas
teorías
éhipótesis
sobre
el sistemanervioso,
que
aunque útiles
enalgun
concepto,
quedan
ya
relegadas
alolvido!
Impre
sas en nuestra mentedebian
estarsiempre
lassiguientes palabras
de
Fausto:
«enverdad
tedigo,
que el hombre que
especula
escomounani
rnal
áquien
unespíritu maligno
hiciese
darvueltas
en unárido
desierto,
encuyo derredor hubiese
magníficas
y verdes
praderas.»
No
es estodecir que
lashipótesis,
teorías éinterpretaciones,
seanperjudiciales
óinútiles, siempre
ycuando
queden
reducidas
ásusjustos
límites;
por
lo
ménos tienen
la inmensaventaja
de
originar,
por
espíritu
de
comprobacion,
experimentos
y observaciones que, si
no demuestranla
exactitud
de
lasospecha, patentizan
sufalsedad
enalgunos
casos, ymucho sabe
quien
estáseguro
de que una cosa no escierta;
por
otraparte,
no es raroque por
esta vía indirecta sellegue
á nuevosdescubri
mientos.
Perosi
nuestra mente seilusiona,
comenzamos áforzar
analo.
gías
y hastahechos,
lo másantitético
hacemosque
vengaencomproba
cion de nuestratésis,
lahipotética sospecha
laconvertimos
enverdad
comprobada,
yal través
de estecristal
somosvíctimas
decontinuas alu
cinaciones,
porque todas
las cosassonsegun el
colordel cristal
conque
semiran.
Nunca
acontece esto con tantafrecuencia
comocuando
nosanticipa
rnos á larealizacion
de los hechos. Seaporque
losanatómicos
porfalta
de medios deestudio anden tardios
en dar á conocer laAnatomía
de loscentros
nerviosos,
seaporque
losfisiólogos
sehayan
precipitado
en elcumplimiento de:sus
tareas,
lo cierto es,que
solo en losestudios
contemporáneos
deFisiologia
del sistemanervioso,
comienza
á notarse algun fundamento
enverdades
anatómicas. Por eso reina tantaconfusion
en lasfunciones
de los centrosnerviosos,
y por eso vernos tantos estu— 9 —
dios
imaginarios
ynovelescos,
por lafalta de conocimientos
anatómicos.Sir
va deejemplo
de lasaberraciones
á quepuede
conducir el nopartir
de buenos
fundamentos,
laestravagancia
delinmortal
Descartes alconsiderar
laglándula pineal
comopunto
de residencia delalma,
sin duda
porque
lopintoresco
delsitio
lepareceria digno
de
tansublimada
concepcion.
Al encontrarse
los
fisiólogos
con unaparato,
cuya extructura les eradesconocida,
sin sabersiquiera
los
órganos
que lo formaban yque
ejer
cia
funciones,
de lascuales apenas
siles
constabasuexistencia de
una manerasegura
ypositiva,
nopodian
hacer másque
divagar;
iban y
vanfantaseando doctrinas basadas sobre
hechosmuy baladíes
casisiempre,
desmintiendo
hoy
lo que ayerdijeron;
deshaciendo mananalo que
hicieron
hoy:
lainterminable
tarea dePenelope.
Difícilmenteseencontraria
enMedicina
cuestion másvertiginosa
yabrumadora que
lade
laFisio
logía
de
los centrosnerviosos.
Así como el
anatómico
le hadicho
alfisiólogo:
aquí
tienes un exófago
y unestómago,
un intestinodelgado
y un intestinogrueso,
unhígado,
unpáncreas
yglándulas salivares,
que
constituyen
partes
integrantes
delaparato
digestivo,
que tienen esta extructura y estas relaciones,
y elfisiólogo
haestudiado
elpapel
quedesempena
cada uno de estosórganos
y de que modo concurrealcumplimiento
de ladigestion,
y asíde
muchos otrosaparatos,
se ha encontrado con unaparato
nervioso,
sin saber queórganos
loconstituyen
y le hafaltado
deconsiguien
te la
principal
base yguia
Otro
tanto le hasucedido
alpatólogo,
y por esto laPatologia
del sistema nervioso haquedado
por tantotiempo
sumidaen la
oscuridad
máscompleta;
únicamentehoy
comienza á levantarse con cierto donaire y
orgullosa
de haberse adelantado enmuchos
puntos
á suspredecesoras,
la Anatomía y laFisiología.
A
semejanza
deArquímedes,
quepedia
unpunto
deapoyo
para desquiciar
elmundo,
elfisiólogo
yel
patólogo,
en cuantodel sistema nerviosose
trata,
reclamandel anatómico
unórgano
para estudiar respec
tivamente
sus funcionesy
susenfermedades.
Pero
ladelicadeza
de los centrosnerviosos,
latenuidad
de muchas desuspartes,
lasemejanza
y casianalogia
de otras esencialmente dis dintas por susdestinos,
suagrupacion
en una masa comun, y de otrolado,
laimperfeccion
yreducidos
alcances de los medios deestudio
de que elanatómico
dispone,
han hecho deleje cerebro-espinal
elobjeto
de constantepreocupacion
porparte
delos
anatómicos,
de losfisiólogos
—
1.0
---y de los
patólogos.
Todos
áporfía
haninvestigado,
ydespues
de mucha
discusion y
duda,
de mucho afirmar ydesmentir,
han
quedado
loshechos
demostrados
yadmisibles
comociertos,
en gran maneracercenados.
Creo no
pecar de
exagerado,
si
mefiguro
que
á ser cierta tansolo
unamilésima
parte
de cuanto se haescrito sobre el sistema
nervioso,
habiamos
de saber
desobra
sumodo
de serpor
complicado
y difícilque
aparezca. Sin
embargo,
cada dia sepublican
nuevasobras
ycada
dia son másextensas,
y todas
las nuevasediciones
estampan
en laprimera
plana corregida
yaumentada,
en vez de imitar áConfucio, depurando
á lasanteriores
de los erroresque
tuvieran,
y
poniendo corregida
y disminuida.
Por este motivo ofrecen untamano
exagerado
muchas de
ellas,
y
por
estemotivo
tambien,
despues
demucho
leer,
sabemos tanpoco.
Cuanto
másvacilante está
unaciencia
y cuan ménosconocido
es unhecho
cualquiera,
másgrande
ygigantesco
sepresenta
estelaborioso
período
depreparacion.
Y esque no sepuede
expurgar lo malo
sinque
exista
algo
bueno: y lo bueno solo seconquista
ábeneficio
detiempo
yde estudio. No
nosapuremos, pues, si
laAnatomía
de los centros nerviosos no es
hoy
loque debiera
ser; á superfeccion
camina
y áella
llegará probablemente,
aunque
sea ápaso lento.
No
pretendo
hacer lahistoria
de laAnatomía
de los centrosnervio
sos:
primero,
porque
no me siento con fuerzapara
ello,
y
segundo
por
que el carácter de esta
monografía
no loconsiente;
pues
de otromodo,
bien ó
mal,
nodejaria
dehacerlo.
Pero sin haceresto,
conviene
á mi objeto decir,
que en eldesenvolvimiento
de estaparte
de laAnatomía,
observo
tresgrandes períodos
que
llamaré,
no sési
contoda
propiedad:
Período
descriptivo.
Período
desistematizacion.
Período
anátomo-fisiológico.
* *
El
período
descriptivo
de laAnatomía
de los centrosnerviosos,
despues
de
muchas vicisitudes
hallegado
ya á superfeccion.
Apesar
de reducirse
esteperíodo
á. unadescripcio-n
minuciosa
yde
tallada
de lasdistintas
partes
que entran áconstituir
los centros nerviosos,
en cadaunade
ellas encontramos unacomprobacion
evidente
delo
dificultoso
que hasido
esteconocimiento.
Comoquiera
que los
nom
bres de una cosa nos
indican
elconcepto
que deella
se haformado,
--
-11
—del
cerebro;
trigono cerebral,
bóveda
de los trespilares,
bóveda
de los cuatro
pilares,
corpustrifidum, triángulo medular, fornix,
vendolete
gemina
do,
etc.: y así demuchos otros,
locual
demuestra evidentemente el dis tintoconcepto
que
hanmerecido
áalgunos
autores antes de conocerse bien.Habiendo
llegado
esteperíodo
á laperfeccion,
cada
parte
delos
centros
nerviosos
esdescrita
contodos
losdetalles
que desearsepuedan,
ycada
una de ellas tienen en lasobras didácticas
de Anatomíadescriptiva
uncapítulo
aparte,
endonde
nocabe másexactitud
ni másprecision.
Peroesta
descripcion presenta
unasérie de factoresaislados
éindependientes,
y lo mismo se
describe
la telacoroidea
despues
deltrígono
cerebral,
que
los
ventrículos laterales
despues
del cuerpo calloso. La
situacion delos
mismos
escasi
loúnico que
impone algun
órden
en sudescripcion.
LaAnatomia de las
formas,
viene á serla de esteperíodo.
Preocupa
más elaspecto
decada
unade
suspartes,
que
lasrelaciones que
entre sípue
dan tener.
La
nomenclatura
correparejas
con ladescripcion:
noobedece
á ra zonalguna,
ni
en nada serelaciona
con unaconcepcion
razonada
y lógica
de los centrosnerviosos.
Ora seoriginan
lasdenominaciones del
grosero
aspecto
deun factor óde
sucomparacion
con unobjeto
cualquiera:
cuerpocalloso,
lira,
glándula
pineal,
cuerpo
estriado,
cuerpofran
geado,
olivas,
amígdalas,
ano,vulva,
etc.;
ora elautor,
quemejor
hadescrito
unaparte
ó unaregion,
le sirve depadrino,
y así losnombres
de
Sylvio, Reil, Morand, Malacarne, Rolando,
Ammon,
Vieussens,
La91-CiSi,
etc., etc.,
vanrespectivamente
vinculados
Ó. los decisura, ínsula,
espolon, pirámide,
tubérculo
ceniciento,
asta,
centrooval, nervios,
etc.Estudiar bien todos
estosnombres,
conoceralgunos
de susSinóni
mos,
comprender
lasituacion
de cada una de laspartes,
recordartodos
losdetalles que
á las mismas serefieren
y tener una idea exacta delpin.
toresco
aspecto
ycaprichosa disposicion
dealgunas regiones,
era conocer á
maravilla
laAnatomía
descriptiva
de los centrosnerviosos. Pero
unaAnatomíadescriptiva empírica,
en la que el anatómico hacetan soloel
papel
de narrador
de lo que veyobserva.
Quizás
noexpresaria
mal mi ideadiciendo,
que ha tomado delos
centros nerviososdistintas
fotografías
de losvarios
aspectos
yregiones
queofrecen,
las cuales pre sentacomopaisajes
sueltos,
sin llamar suatencion
otra cosa que lo quepuede
darde
síunafotografía: copia
desuperficies;
y por lomismo,
aun—
12
---paciones
de
órganos
y cavidadespor
losmismos
formados,
no leha sido
posib
epresentar
otrassíntesis,
ni otrosconjuntos,
quesíntesis y
conj
untossuperficiales.
Ha abierto el anatómico la
cavidad
cráneo-raquidea,
y
haestudiado
hoy
unaparte,
mariat.aotra,
de las que á su vista sepresentaban;
y una vez conocidastodas,
hadescrito
lasuperficie
de los centrosnerviosos,
enumerandosus distintas
partes
por órdenempírico
de situacion.
Ha pe netradodespues
en el espesor de la masa y hadescrito
deigual
maneralcs
distintos aspectos
de lamisma.
Ha encontradocavidades
y ha obser vado éindagado
suforma,
sus límites y sus más recónditasprolonga
ciones.
lía llamado su atencion una sustanciablanca
y una sustanciagris,
y condetenimiento
ha marcado lasregiones
de ambas Deesteanálisis,
llevado á laperfeccion,
hansalido obras
ymonografías
verdadera menteadmirables;
ysiempre
seránrespetables
en la Anatomíade lcs
centrosnerviosos,
losBurdach, Stilling, Bischoff, Foville, Leuret,
Gratiolet,
etc.,
etc.;
lasdescripciones
tanmagistrales
y tan acabadas deSappey
y deCruvelhier,
para
nocitar más que obrasdidácticas y de
todos
conocidas;
yen lo referente á larepresentacion
desusdistintas
partes por
medio de
láminas,
verdaderas obras dearte,
así por laexactitud
de
lacopia
como por suvalor
artístico,
el altamentenotable Atlas de
Hirschfeld.
Pero
con todoesto,
laAnatomía
descriptiva
de
los centrosnerviosos
no
pasa
de ser unadescripcion empírica
y de
escasa utilidad yaplica
cion,
dada
suimportancia,
á laFisiología
y á laPatología.
Es comosi,
abriendo las
paredes
del
abdómen, estudiáramos,
por
elórden
quemejor
nos
pareciera,
todos
losórganos
contenidos
endicha
cavidad,
sin tener en cuenta que unos formanparte
delaparato
digestivo,
otros del urinario)
estos delgenital, aquellos
delcirculatorio,
etc.Dicho estudio
satisfaria muy
poco lasexigencias
de laciencia.
De
aquí
que la Anatomíadescriptiva
de los centrosnerviosos,
tal
como se estudia
hoy
en las obrasclásicas,
si
bien resultaagradable
por lopintoresca,
esalgo
estéril por
las escasasaplicaciones
que de ella sedesprenden
con relacion á las funcionesy
á lasenfermedades de los mis
mos,
mucho
másteniendo
encuenta,
que suinmensa
mayoría
se preocupan poco de dar
mayor
importancia
áciertas
partes,
que laFisiolo
gia
y laPatología
de
consuno handemostrado sobradamente
elinterés
que
ofrecen,
yen cambio ladan
á otras bastantesecundarias
en los mo--- 13
---rica no seconviertaen Anatomía
razonada.
En el cursode
estosestudios
quedará
suficientementecomprobado
este aserto.La escasa utilidad para el
fisiólogo
y elpatólogo
de
esta Anatomíadescriptiva,
sihubiese necesidad
depatentizarla,
secomprenderia
de
sobracon solo tener en cuenta que no
presenta
grupos
deórganos
simi
lares,
bien sea por su naturaleza ydisposicion
anatómicas,
bienpor
suspropiedades
fisiológicas.
Ofrece el másacabado
análisis,
pero
le falta lasíntesis,
quecoloque
á cada factor en el sitio que lecorresponde.
Bien hubieraquerido
elanatómico
hacer estasíntesis,
pero
le falta banelementos
paraello.
Lasrelaciones
de unaspartes
con otras eranperfectamente
conocidas,
pero
susconexiones
escapaban
átoda investi
gacion, particularmente
en cuanto alcerebro,
á laprotuberancia
yal
cerebelo serefiere.
No así para lamédula
ypara
elbulbo,
cuya Anatomía
hacetiempo
anda por buencamino,
si
bienaun no escompleta.
Pero al intentar
seguir
paso á pasoel
trayecto
de lasfibras,
al través de laprotuberancia
y de lasustancia
blancacerebral;
alquerer
conocer laterMinacion
de lasmismas;
alinvestigar
los lazos deunion
entre lasdis
tintas
componentes
deleje
encéfalo-n„-xlular;
alescudrinar
dequé
ma nera entran enparentesco
con lasustancia
gris,
y al buscar elpapel
y lasignificacion
deesta,
elescalpelo
y lasagacidad
del anatómico
han tropezado siempre
con latenuidad, complejidad
y naturaleza
de laspartes
queanalizaba.
Cuando
susinvestigaciones,
enel
terreno de laobservacion,
encuentran una
barrera,
entonces lahipótesis suple
á laciencia
positiva,
elfisiólogo contribuye
por necesidad á estasconcepciones
teóricas,
y de estamanera es como sehan inventadomuchos detalles
de extructuracerebral,
que más tarde no han salidocomprobados
yque
hanservido
solopara
una necesidad demomento,
y parafundar doctrinas que
no hansido
más que la ilusionde
uninstante.
Todopor adelantarse
á la suce sion de loshechos,
como antes decia.No
cuestatrabajo comprender
porqué
elanatómico
nohapodido
desvanecer la oscuridad que envuelve la Anatomía de los centros
nerviosos,
disponiendo
tan solo deiguales
medios
de losque
le hanservido para
conocer
aparatos
relativamente
tangroseros
ytansencillos,
como eldi
gestivo, respiratorio,
etc.,
etc. Necesita otrosmétodos
deestudio para
adelantar conprovecho
en la textura de los centros nerviosos.Si durante este
periodo descriptivo
no le ha sidoposible
al anatómico
--14
---exacta,
de los centrosnerviosos,
en supacientísima
obra
deanálisis
haido
reuniendo
gran número de datossuficientemente
comprobados,
para
servir
de base alperíodo
de sistematizacion ó desíntesis. Cierto
esque
muchas
de
suscreencias
han debidoborrarse,
pero
otrassirven de
buenmaterial,
aunque
aparezcan en lasobras
descriptivas
coninsignificante
valor,
porque
seestudian aisladamente lasconexiones
de unórgano
ó eltrayecto
y terminacion deun grupo defibras,
sinque vengan
agrupados
conotros
constituyendo
sistemas.Intentada
ha sido lasistematizacion
pormuchísimos
anatómicos;
pero
comotentativas
prematuras,
de muyexiguos
resultados.
Paraque
se
forme
concepto
de laseguridad
y exactitud quepodian
ofrecer
estassíntesis,
recordaré
tan solo unejemplo: Vieussens, Tarin,
etc.,
descri
bian los
pilares
anteriores
deltrígono-cerebral
como uncordon
único,
que se
terminaba uniéndose
con la comisuraanterior;
mástarde
sede
mostrósu
bifidez,
ySantorini
siguió
sutrayecto
átravés de
lasustancia
de
los tálamos
ópticos
hasta lostubérculos
mamilares,
que
con elnombre
debulbi
fornicis,
que por este motivo yenaquella época
recibieron
deGunz,
marcan una de lasetapas
porque
hapasado
elconocimiento
exactodel
trigono; finalmente, Vicq d'Azyr
vino ádemostrar que iban
aún máslejos,
yque
despues
desureflexion
en los tubérculosmamilares,
se internaban
otra vez en lostálamos
ópticos
para terminar
debajo
de
sustubérculos
anteriores;
yaundespues
deesto,
vieneenestos últimostiem
pos
Gruvelhier, afirmando, erróneamente,
que lospilares
anterioresde
la
bóveda
se continúancon lasfibras
de la tenicesemicircularis.
Y eso
que
lospilares
anteriores de labóveda
sonperfectamente
visibles,
ypueden seguirse
con toda facilidaden razon desuaislamiento
ydeser un
cordon
blanco en medio de sustanciagris. ?Qué
nohabrá
sucedido
con los hacecillosdel
centrooval,
con elcuerpo
calloso,
conlascomisuras,
conlaspirámides,
conlospedúnculos cerebelosos,
etc.,
etc.?
Confusos
y mezclados unos conotros,
de color yaspecto
iguales,
sin nin guna líneade
demarcacion entreellos,
y por otraparte,
sindisponer
el anatómico de medios para diferenciarlos yaislarlos,
forzosamente su estudio
ha dehaber
sidolargo
y penoso, ysuhistoria ha de
estarcuajada
deerrores. Si la extension deltrabajo
lopermitiera,
no meseria
difícilpresentar
numerososejemplos,
corno el antescitado,
del lento paso conque se
ha
caminado al conocimiento de muchaspartes
de los centrosnerviosos,
no con lafacilidad
delanterior,
sino condificultad suma y--15 —
jos
éinvestigaciones
detodo
género,
nosencontramos,
consólido sosten,
enlosprimeros peldanos
de
unaescalera,
cuyo término apenas di
visamos.
De
aquí
que
por másque
los dosperíodos
deanálisis y
síntesis,
ódescriptivo
y desistematizacion,
coexistan
yhayan
nacido
tanjuntos
como dos hermanos
gemelos,
intentesepararlos,
porque
representan
unanacronismo
científico,
ypor
estar íntimamenteconvencido
deque,
á pesar de nuestrapropension
ásintetizar
y ágeneralizar,
aun sin elementos
suficientes para
ello,
estassíntesis
y estasgeneralizaciones
prema
turas son tan
perjudiciales
á lapercepcion
comoalrazonamiento.
En el
bosquejo,
que
ágrandes
rasgosvoy
á trazardel
segundo
pe
ríodo,
ha de
quedar
demostrado que
aunhoy
esarriesgada
toda
tentativa
de sistematizacion
completa
y exacta.Ya
en1663,
Willis intentó
unaconcepcion general
del modo de
serde
los
centrosnerviosos y admitió
dosórdenes de
fibras enlosmismos:
unas
longitudinales
ódivergentes,
quevan á terminarenlascircunvolu
ciones,
y otrastransversales
óconvergentes,
constituidas
por elcuerpo
calloso.
Esta
concepcion
deWillis,
ápesar de
susencillez
y ápesar
deexpresar
tansolo,
por
asídecirlo,
elgrosero
aspecto
deleje
encéfalo
medular
y de estarfundada
enhechos
alparecer
evidentísimos,
fué
prematura
ydebia sufrir muchas oscilaciones
antes noquedase
demostrada,
como lo estáhoy,
la certeza de suopinion
acercade las fibras longitudinales
y transversales.
Malpighi
yVieusens, contemporáneos
de
Willis,
sehicieron
partida
rios
desusdoctrinas,
quefueron admitidas
como ciertas ytrasmitidas
degeneracion
engeneracion
hastaprincipio
delsiglo actual,
en que,remozadas y aumentadas por Gall y
Spurzheim,
laspresentaron
estos autorescon
mayores detalles
en sus notablestrabajos
sobre elsistema
nervioso.
Senalaron en las fibrasdivergentes,
extendidas
desde la médula
á lasustancia
cortical,
lospedúnculos
inferioresdel
cerebelo,
comopropios
de esteórgano,
y laspirámides
anteriores
comopeculiares
alcerebro;
yen lasconvergentes,
cuyotrayecto
esdesde
lasustancia
cortical
de
unlado
á la delotro,
laprotuberancia
ypedúnculos
medios del
cerebelo
paraeste,
el cuerpo calloso y lascomisuras
para elcerebro.
--
E6
—era tal
comisura
inter-hemisférica,
sino la
prolongacion
de
lospedún
culos
unidos en la línea media.Como
consecuencia, _la
sisternatizacion deWillis
nopodia
ser cierta y solopodia
haber
en los centros nerviososunacategoría
de fibras: lasfibras
longitudinales.
Los
excelentestrabajos
deFoville,
confirmados
porCruveilhier,
vinieron tambien
en contra dela
opinion
deWillis,
y elcuerpo
callosodejó
deser una comisurainter-he
misférica,
y el sistema defibras
convergentes
ydivergentes,
que por
tanto
tiempo
habia
prevalecido
enlaciencia,
que tantostrabajos
y doc trinasoriginara
y quesirviera
deapoyo
á numerosas cuestionesde
Fisiología
y dePatología,
sedisipó
como porencanto,
dejando
suspensas
en el aire y abandonadas á su
propio
peso,
numerosasespeculaciones
científicas, hijas
suyas
legítimas
y por ellasustentadas
hasta entonces. En nuestros dias ha sido al parecerconfirmada
deuna maneradefi
nitiva
la idea de Willis acercadel cuerpo
calloso,
pero corno finalde
cuentas,
resulta
evidente que este autorno sefundó
entonces en datospositivos
y queadivinó,
más bien quebasó
enhechos,
sudoctrina. Cual
acertó, pudo
haber errado:
estoha sucedido
ámuchos,
ápesar de
sugrandísimo
talentoy
buencriterio,
congrave
perjuicio
de laciencia
ysus
cultivadores.
Pero estos
conjuntos
presentados
así grossomodo,
son tan soloel
gér
mende lo que
debe
serla verdaderasistematizacion
de los centrosner
viosos. No basta decir quehay
ungrupo de fibras
convergentes
y
otrode
fibras
divergentes:
es necesario describir los hacesque forman
lasmismas,
estudiar
sutrayecto,
su situacion y laspartes
que ponen
encomunicacion.
Decir que
lasfibras
nerviosasdel
eje
encéfalo-medular forman
unaparato
primordial
y otrosecundario,
constituidoel
primero
por
las fi braslongitudinales
y elsegundo
por todas las demásque
unen transversalmente
las dos mitades enque
estándivididos
los centrosnervio
sos,
como lo hacenalgunos
autorescontemporáneos,
y
entre ellosSap
pey,
esrepetir
condistintos
vocablos las ideasde
Willis,
deGall
yde
Spurzheim.
La
sistematizacion,
útil á laFisiología
y á laPatología,
hade ser
hoy
por
hoy aquella
que describa los haces de fibras de una maneratopo
gráfica,
si valeexpresarse
así,
sinprejuzgar
deuna manera absoluta lasfunciones
que cada unodesempene.
Lasagrupaciones
ysíntesis que
sehagan
han deserpuramente
anatómicas.---
17
--Ninguno puede
serperfecto,
porque varios
puntos
están
aun endiscu
sion;
pero sisuficlentemente
útiles paraofrecer
granventaja
suestudio
vsupeditar
ya en granparte
ladescripcion
empírica.
Luys,
adelantándose á laciencia,
ha
presentado
unaobra de siste
matizacion
completa
de
los centrosnerviosos. No
queda
en sulibro fibra
que no sesepa
ápunto
fijo
endónde comienza y
endónde acaba. Par
tiendo
de las inasmcentrales del
encéfalo,
admite dos grupos de fibras:
unas que vienen de laex_trernidad medular
y otrasde
lasuperficie
cor
tical;
lasprimeras
forman el
sistema defibras
convergentes
inferiores;
las
segundas
el
sistema defibras
convergentes
superiores;
unas y otras van ;Iparar,como áun centro
comun,
álos núcleos
opto-estriados.
Como sobre
puesto
alsistema
convergente
inferior,
describe
elaparato
cerebelos°,
y
finalmente,
el sistema de
fibras
comisurantes,
extendido de
una á otrasustancia
gris
en todala
longitud
del
eje.
No
solo nosindica
eltrayecto
y lasuperposicion
de las
fibras,
sino
que forma grupos
ysistematiza asimismo la sustancia
gris,
en conso
nancia
con susdescripciones
de
lasustancia
blanca,
y presenta
enlos
centros
nerviosos
una série deaparatos
completos
yperfectos.
Luys
no ha encontradoobstáculos
en elestudio de la
Anatomía
do
los centros
nerviosos. Es verdad que,
con unafan de resolverlo
todo,
cuando no han
hablado los
hechos,
ha hablado
sufantasía,
ylas inven
cioneshipotéticas sustituyen
enmuchos
puntos
la falta de conocimien
tos
sólidos.
Bajo
unaidea
preconcebida,
que
pcdia
haber sido
fecunda
si no
hubiese sido
exajerada,
haprescindido
de los estudios que estaban
en
contradiccion
completa
con susdoctrinas
yde los hechos que de
muestran
palpablemente
la falsedad de
algunas
de
susafirmaciones.
Desde
suprimera
publicacion,
ha
seguido
Luys
suspacientísimos
estudios con una constancia y
sagacidad
admirables,
y macho le deberán
á este autor
la
Anatomía,
laFisiología
yla
Patología
de los
centros nerviosos.
Elmétodo,
que haseguido
en susestudios,
nopodia
ménos de
darle
resultados,
y sibien
escierto
que en susobras campea
engran
manera la
imaginacion,
tambien abundan los datos
positivos
y
lacie
ncia de
observacion.
La obra de
Luys
sobre
elsistema
nervioso,
no esobra de la
ciencia,
es
obra suya
porhaberse adelantado
á
ella.
?Confirmará
la ciencia
susdoctrinas?
Siacaso, les
tocaesperar la
época
del
perdon,
pues actual
mente
muchas de
suscreencias
están ya
firmemente condenadas.
Otro
autor,
de allende el
Rhin,
seha
consagrado
muy
especialmente
-- 18 —
á
unestudio
de estanaturaleza
sobre los centrosnerviosos,
recogiendo
muyópimos
frutos. EsMeynert, quien
hapublicado
numerosostraba
jos
sobre
laAnatomía razonada
de los centrosnerviosos, trabajos
que,
dada
suprecision
ynovedad,
hansido
elincentivo
denumerosas comprobaciones
departe
devarios
centroscientíficos
yde
algunos
hombres
de
estudio,
resultando confirmadas
en sumayor
parte.
Muchos
puntos
de lahistología
de los centrosnerviosos
hansido
aclarados por
lasinvestigaciones
de
Meynert,
y muchos detalles de
tex turay de
trayecto
defibras
quedan
definitivamente establecidos.
Tambien
Meynert
hasistematizado
y haestablecido
cuatrogrupos
en la
sustancia
gris
deleje
encéfalo-medular.
Haagrupado
lasustancia
blanca
y hadescrito
en unasíntesis
suesquema
deproyeccion,
formado
por
tresórdenes
defibras:
fibras
depro
yeccion
deprimero,
desegundo
y de tercer órden:completando
estasistematizacion
con lasfibras
comisarantes y las
fibras
deasociacion.
Meynert
ha idoformando
suobra lentamente yaun no la ha
terminado.
Amedida
que hacomprobado
un nue vohecho
ó hadescubierto
eltrayecto
de un nuevofascículo de
fibras,
ha
anadido
unapiedra
más á suedificio. No
se haprecipitado,
ni haquerido
forzar elpaso,
presentando
deuna vez unconjunto
acabado y
perfecto.
Donde
haencontrado
unainterrupc,ion
se hadetenido,
aunque
alguna
vezhaya
dado
unaescapada
al terreno de lasinterpretacio
nes.Ha analizado
primero,
hasintetizado
despues.
Por eso susdoctri
nashanresultado bastante sólidas
y susescritos
estánllenos de
verdades.
Las
investigaciones
deMeynert
han sidovulgarizadas
connotable
claridad por
Huguenin
en suobra
deAnatomía
de los centrosnerviosos,
y
sirven ya de
base connotable exito y
prácticos
resultados
ámuchos
estudios de
Fisiología
yPatología.
La
sistematizacion de
Mey-nert
tiene el notable mérito de
serpura
mente
anatómica.
Noprejuzga
elmodo
deverificarse
unafuncion,
niestá basada
enconcepciones
teóricas.
Indaga
y busca lacomprobacion
de
los
hechos enlasmejores fuentes,
y los factoresdescritos,
lo son independientemente
de lafuncion
quedesempenan
yreciben
sunombre
en las
pilas
bautismales de
la Anatomía.Sin
embargo,
no seabstiene
de hacerconsideraciones
fisiológicas,
que
podrán
ó no serciertas,
pero
laFisiología
nosojuzga
á laAnatomía,
y sus
descripciones
tienen vidapropia
éindependiente.
Alrevés
de--
19
—ha hechosu
obra de tal
modo,
que
si sequita
lafuncion,
casi
desapare
ceelórgano.
Si antes he
dicho que
estaparte
de la Anatomía en nuestrasobras
clásicas,
en las cuales se estudia aun en superíodo descriptivo,
eraagradable,
peroalgo
estéril,
ahora diréque
laAnatomía
desistematiza
cion
estan sabrosa y tanútil,
aun dada suimperfeccion,
que causa grandísimo deleite ir
tocando las numerosasaplicaciones
quetiene
á la Fisiología
y á laPatologia.
Estudiar
la Anatomíadescriptiva
de los centros
nerviosos,
escontemplar
una ciudad desde unglobo;
estudiar laAnatomía de
sistematizacion,
espasearse por
sus calles ypenetrar
ei-1 suspalacios
y viviendas. Loprimero podrá
sermás vistosoy
agradable,
pero
losegundo
es más realy
práctico.
Por más que fuese muy
satisfactorio
creerque
esposible hoy
unasistematizacion
completa
de los centrosnerviosos,
es denecesidad
recordar que
faltan
aunmuchos
elementos paraello.
Ofrecerealmente
una
perfeccion
relativa
la Anatomía razonada de lamédula,
pero en elbulbo,
en laprotuberancia,
enel
cerebelo y er;el
cerebro, quedan
aunmuchos
puntos
oscuros.Solo
citaré dosejemplos,
en altogrado
demos
trativos,
por referirse
á factores notables yque por
sutamano éimpor
tancia
nopresentan
la delicadeza de otros másinsignificantes. Meynert
mismo declara
que no se conoce en quepunto
de
lacubierta cortical
van áterminar
lospedúnculos
cerebelosos
superiores.
Loscuerpos
restiformes,
segun
Meynert, despues
de
sutrayecto
al
través delbulbo,
irian á continuarse con loscordones anteriores
de lamédula;
segunSappey
yel
anotador deHuguenin,
Duval,
se unen elde
un lado conel
del otroen el
espesor del bulbo
porintermedio
de las fibrasarciformes,
y el
mismo
Huguenin
cree que unapequena
parte
de las fibras se continúa con los cordones
anteriores
y que lasdemás, despues
de atravesar lasolivas,
seentrecruzan con las dellado
opuesto
parapenetrar
en elfuniculus
cuneatus etgracilis.
Comoestos,
sonmuchísimos
losejemplos
que
podria citar,
aparte
dealgunos
otrospuntos
tanoscuros,
que nisiquiera
en discusion entran. Lasistematizacion,
pues,
nopuede
sercompleta,
mientras no se conozcan estosfactores. Creerlo y
practicarlo
de otro modo
seria
prejuzgar.
En el estado actual de la
ciencia
esoportuna
y
utilísima
una tenta tiva desistematizacion
de los centrosnerviosos. Una realizacion defini
tiva,
seria
prematura
yarriesgada.
_
--
20
--Aún
cuando fueseposible
unasistematizacion
completa
delos
centros
nerviosos,
sin error nilaguna
de
ningun género,
estaparte
de
laAnatomía
nohabria alcanzado
la metade
superfeccion.
Mucho
másventajosa
que laAnatomía
descriptiva empírica,
más útil queella
alfisiólogo
y alpatólogo
porofrecerles
algo
sobre que
estudiar,
nohabla
aún con la
elocuencia
que en sus demás ramasacostumbra. No
esmás
que
unmapa,
enel
cual,
conlíneas
de carácter ycolor
iguales,
se mar can así lascordilleras
como los nos, los canales como loscaminos
dehierro,
etc.,
etc.: alviajero
le
tocaindagar
para
qué
sirven
aquellas
indicaciones.
Al
fisiólogo
lecorresponde
estudiar
eldestino
decada hacecillo
de fibras y de cada grupo decélulas que
elanatómico
lepresenta,
y'esto
hecho,
seráposible
la síntesisanatomo-fisiológica
de los centrosnervio
sos, y
en vez dedescribir
unasustancia
gris
de losnúcleos
centrales,
de lacubierta
cortical,
delos
cuernosanteriores,
etc.,
yfibras
de los cordones
anteriores,
de lospedúnculos
cerebelososmedios,
de lacápsula
interna,
delcuerpo
calloso,
etc.;
en vez de estudiaraisladamente las
relaciones
yanastómosis
que entreambas
existen;
en vezde
reunirtodos
estos
elementos
engrupos, segun
laposicion,
direccion
ytrayecto
de
los
mismos,
los sintetizará
elanatómico segun
susfunciones,
y descri
biráen el sistema
nervioso
unaparato motor,
otrosensitivo,
otro vegetativo,
otrointelectual,
etc.;
enseguida
se hará cargode las relaciones
que
tengan
uno conotro,
como lo hace enelabdómen
con losaparatos
digestivo
yurinario,
y entónces le hande resultar muy sucundarios la
forma de los centros
nerviosos
ymuchos detalles que
hoy
sonla base de
toda
descripcion
clásica.
Algunas palabras,
yafamiliares
en ellenguaje anatómico,
indican
que el
fisiólogo
no se datregua
nidescanso
en elcumplimiento
de
sumision:
los nombres decuernos anteriores ó motores yposteriores
ósens;tivos,
nohipotéticos
ya, sinocomprobados
y
perfectamente
sinónimcs,
son el
primer
paso firme que la Anatomía de los centrosnerviosos da
hácia
elperíodo anatomo-fisiológico.
No
representan
el carácter de esteperíodo
ni laFrenología
deGall,
al encontrarun sitiopara
cada funcion ypresentar
sus cuadrostopográ
ficos delocalizacion,
ni lascreencias
deComte, quien consideraba
destinada
laparte
anterior de loshemisferios
á los fenómenosintelectuales
y la