Giovanissima – dal 1907 e fino al 191198 –, è assistente volontaria di Botanica.
Immediatamente dopo99 è assistente di Botanica “in soprannumero”100 presso
l’Istituto botanico dell’ateneo pavese e a partire dal 1917 (e fino alla partenza per Santiago de las Vegas), assistente “per comando”101.
Il 20 novembre 1915102 ottiene l’abilitazione alla libera docenza in Botanica
generale103. È la prima donna in Italia a conseguirla per suddetta disciplina.
La libera docenza104 si poteva conseguire per titoli o per esame e per ottenerla era
necessario «rivolgere istanza al Ministero, indicando l’insegnamento a cui si intende essere abilitato, l’Istituto dove si prefigge di esercitarla, e se si intende conseguirla per esame e per titoli». L’idoneità degli aspiranti per esame veniva riconosciuta da una commissione nominata dal ministero105. Il suo conseguimento autorizzava il
titolare all’insegnamento in università o altri istituti a titolo privato.
Con suddetta abilitazione, impartisce a Pavia dall’anno accademico 1915-16 fino al 1919-20 il corso libero di Tecnica microscopica applicata allo studio delle piante medicinali e industriali106; è poi supplente del corso ufficiale di Botanica sempre
nella R. Università di Pavia107.
95 Ivi. Il corsivo è di Mameli. 96 Ivi.
97 Ivi.
98 Anni Accademici: 1907-08; 1908-09; 1909-10; 1910-11. Ivi, p. 4.
99 Anni Accademici: 1911-12; 1912-13; 1913-14; 1914-15; 1915-16; 1916-17. Ivi. 100 Ivi.
101Anni Accademici: 1917-18; 1918-19; 1919-20, Ivi. Sono diversi anche i premi e gli assegni di ricerca che Mameli cita nell’Elenco dei titoli e delle pubblicazioni: nel 1910 vince il concorso ad assegni di perfezionamento “all’interno” per l’anno accademico 1911-12 nella Facoltà di Scienze; sempre nel 1910 vince il concorso ad assegni di perfezionamento “all’estero” per l’anno accademico 1911-12 nella Facoltà di Scienze; nel 1919 il premio ministeriale dell’Accademia dei Lincei; nel 1923 vince il concorso al premio di fondazione A. Forti, del R. Istituto Veneto di Scienze, Lettere ed Arti, quale incoraggiamento agli studi di Botanica.
102 <http://www-4.unipv.it/webcesup/annuari/index.php?page=annuario&file=212&id=61&q=66> (24 agosto 2015).
103 E. MAMELI, Elenco dei titoli, cit., p. 5.
104 Secondo il R. Decreto n. 465 pubblicato sulla «Gazzetta Ufficiale» n. 301 di mercoledì 23 dicembre 1903, art. 49.
105 Secondo Ivi, art. 50.
106 L’Università di Pavia la registra piuttosto come libero docente di suddetto corso per l’anno accademico 1920-1921, e come docente del corso di Botanica nel 1922-23 e 1923-24: <http://prosopografia.unipv.it/docenti/docente/1932/insegnamenti/>. Pavia registra in quegli anni
accademici il suo domicilio a Cuba: <http://www-
Tali attività si interromperanno quando – dopo aver sposato Mario Calvino il 30 ottobre 1920 – Eva s’imbarcherà il 13 novembre di quello stesso anno a bordo del transatlantico Aquitania per Cuba, per rimanerci quasi cinque anni. Quel viaggio oltreoceano per i coniugi rappresenta oltre al raggiungimento della propria sede di lavoro, un viaggio di nozze: è probabilmente scattata sull’Aquitania la fotografia che li ritrae appoggiati a una ringhiera, con l’allegria di chi vive la scienza in famiglia.
partire dall’anno accademico 1924-25 non appare più sull’annuario pavese: <http://www- 4.unipv.it/webcesup/annuari/index.php?page=annuario&id=62&file=214> (24 agosto 2015).
107 Non è chiara la datazione ma probabilmente si riferisce agli anni accademici 1918-19 e 1919-20. E. MAMELI, Elenco dei titoli, cit., p. 5.
Appendice documentaria e iconografica108
Figura 1 - Eva Mameli Calvino (1912). Fonte: FMCEMC, Album 1 - Inv. 3
108 Tutte le immagini riprodotte in questa appendice provengono dal "Fondo Mario Calvino e Eva Mameli Calvino" - Biblioteca Civica "Dottor Francesco Corradi" di Sanremo (d’ora in poi FMCEMC).
Figura 3 - Foto sul Siracusa (1912). Fonte: FMCEMC, Album 8 - Inv. 584
Presencia del Dr. Augusto Bonazzi en el desarrollo de la agricultura científica de Cuba y Venezuela
The scientific work of Dr. Augusto Bonazzi on the development of the agriculture in Cuba and Venezuela
DOI: 10.19248/ammentu.237 Recibido: 13.09.2016
Aceptado: 05.10.2016
Concepción DÍAZ MARRERO
Unión Nacional de Historiadores de Cuba (UNHIC) Sociedad de Historia de la Ciencia y la Tecnología (SHCT) Sociedad Cultural José Martí (SCJM), Cuba
Abstract
Dr. Augusto Bonazzi developed a successful scientific work, in the Cuban agriculture, since 1924, when he began to work with Dr. Mario Calvino and his wife Dr. Eva Mameli on the Agricultural Experiment Station of Sugar Cane and at the School of Agriculture in Chaparra Sugar Mill (in the former Oriente province, nowadays Las Tunas), and later, since 1929 to 1937 at the Agricultural Experiment Station of Santiago de las Vegas, in La Habana province. Finally, in 1937, he went to Venezuela, where he worked as researcher and university professor, until his latest days, in 1974. He became one of the most relevant scientific of this country in the fields of Agriculture Engineer, Chemist and Geophysics.
Keywords
Bonazzi, Biography, Agricultural Sciences, Cuba, Venezuela
Resumen
El Dr. Augusto Bonazzi realizó una destacada labor en la agricultura científica en Cuba principalmente a partir de 1924, cuando comenzó a trabajar con el Dr. Mario Calvino y su esposa Eva Mameli en la Estación Experimental de la Caña y la Escuela de Agricultura del Central Chaparra (antigua provincia de Oriente, actual Las Tunas), y más tarde, en 1929, en la Estación Experimental Agronómica de Santiago de las Vegas, provincia de La Habana. Luego, en 1936, marchó a Venezuela, donde se desempeñó como profesor universitario e investigador hasta su muerte en 1974. Llegó a ser una de las figuras más relevantes de su tiempo, en las especialidades de Ingeniería Agronómica, Química y Geofísica.
Palabras claves
Bonazzi, Biografía, Ciencias Agrícolas, Química, Geofísica, Cuba, Venezuela
A pesar de que en el siglo XX la presencia de los especialistas italianos que se dedicaron a las Ciencias Agrícolas en Latinoamérica no fue numerosa, en algunos casos resultó decisiva para el posterior desarrollo de la agricultura científica en el área. Así tenemos varios ejemplos: el Dr. en Ciencias Agrícolas Giuseppe Russo en la República Dominicana, que marcó el inicio de la especialidad de Entomología Agrícola en ese país; el Dr. en Ciencias Agrícolas Mario Calvino, recordado con admiración y respeto en México y Cuba por su destacadísimo y multifacético trabajo; y su esposa, la Dra. en Ciencias Naturales Eva Mameli, que publicó importantes trabajos sobre la caña de azúcar y el tabaco en Cuba, a la vez que fue la iniciadora de las actividades científico técnicas de la mujer en la agricultura cubana. El Dr. Augusto Bonazzi se distinguió en el quehacer científico agrícola de Cuba; además, su trabajo en Venezuela fue decisivo para el desarrollo de la Ingeniería Agronómica, la
Bacteriología, la Química en general y para la Fisicoquímica y la Geoquímica en particular.
El valioso dúo de científicos formado por el matrimonio del Dr. Mario Calvino y la Dra. Eva Mameli realizó un extraordinario trabajo en la Estación Experimental Agronómica de Santiago de las Vegas. Él como Director de esta institución a partir de 1917 y ella como Jefa del Departamento de Botánica a partir de 1920, fecha en que contrajeron matrimonio.
En 1924 la vida les ofrecería un nuevo reto a los Calvino-Mameli. Ambos marcharon al poblado de San Manuel, en la antigua provincia de Oriente, a instancias del Dr. Eugenio Molinet, administrador de los centrales Chaparra y Delicias, pertenecientes a The Cuban American Sugar Company, con el fin de fundar en esa zona la Estación Experimental de la Caña y la Escuela de Agricultura “Chaparra”, para lo cual solicitaron la colaboración de un grupo de expertos, entre ellos tres jóvenes italianos: el Dr. Giovanni Ceresa, el Dr. Francesco Mastio y el Dr. Augusto Bonazzi, a quien está dedicado este trabajo.
El Dr. en Ciencias Agrícolas y Químicas Augusto Bonazzi permaneció en Cuba de 1924 a 1936, primero en la Estación de Investigaciones de la Caña y la Escuela Agrícola “Chaparra” y después, a partir de 1929, en la Estación Experimental Agronómica de Santiago de las Vegas, donde su trabajo ha permanecido casi en el anonimato. Sin embargo, en Venezuela su figura es muy conocida y constituye uno de los pilares fundamentales de la investigación y la enseñanza de la Ingeniería Agronómica y, en especial, de la química, la biología de suelos y la geoquímica. Es por esto que nos hemos dado a la tarea de investigar su quehacer científico en Cuba, específicamente en la antigua Estación Experimental Agronómica, con el fin de que pueda ser valorado en su justa medida el aporte que realizó a la agricultura científica cubana. Analizamos también su valioso trabajo en la hermana nación de Venezuela, país donde residió desde 1937 hasta su muerte, ocurrida en 1974.
Para la realización de este trabajo nos hemos apoyado en la siempre valiosa información contenida en el Archivo Institucional y la centenaria Biblioteca “Juan T. Roig” del Instituto Nacional de Investigaciones Fundamentales en Agricultura Tropical “Alejandro de Humboldt”, antigua Estación Experimental Agronómica de Santiago de las Vegas1, donde hemos consultado el expediente personal del Dr. Bonazzi2 y
diversas publicaciones de aquella época como el «Ohio Agricultural Experiment Station Bulletin», y las revistas cubanas: «Revista de Agricultura, Comercio y Trabajo» y «Revista de Agricultura»; así como boletines, circulares y otros documentos. También se realizaron consultas en la Biblioteca del Museo de Historia de la Ciencia, de la revista «Chaparra Agrícola» y de las «Memorias de la Sociedad de Historia Natural “Felipe Poey”». Igualmente se accedió a varios sitios web de Estados Unidos de Norteamérica y de Venezuela.
El Dr. Augusto. Bonazzi nació en Roma en 1890. En Italia recibió una sólida preparación académica, ya que tuvo la posibilidad de estudiar la carrera de Ciencias Agrícolas en la Universidad de Nápoles y la de Química en la Universidad de Roma. Contando solo con 23 años, en 1913, comenzó a trabajar como investigador en la prestigiosa Estación Experimental Agronómica de Wooster, Ohio, en la especialidad
1 Esta institución, establecida en 1904, fue la primera Estación de su tipo, en Cuba y en Hispanoamérica. La primera en Latinoamérica fue la de Campinas (Brasil) fundada en 1887.
2 Archivo Institucional del Instituto de Investigaciones Fundamentales en Agricultura Tropical, Santiago de las Vegas, Cuba (AINIFAT), Fondo Estación Experimental Agronómica de Santiago de las Vegas,
de Tecnología y Biología del Suelo3. A pesar de su juventud, el investigador italiano
se destacó por su trabajo y publicó numerosos artículos, tanto en los boletines de la propia estación donde trabajaba, como en otras revistas científicas norteamericanas de la época, como por ejemplo: «Journal of Bacteriology», «Journal of Agricultural Research», «Botanical Gazette» y «Agricultural Student».
Sus vastos conocimientos y su consagración al trabajo influyeron en la decisión de los Calvino-Mameli para contratar al joven científico en 1924, para que formara parte del personal que trabajaría junto a ellos en los nuevos centros de Chaparra.
Al Dr. Bonazzi se le encargó la jefatura del Departamento de Química Agrícola y Biológica en la Estación de Investigaciones de la Caña. Allí se ocupaba de los estudios químicos y biológicos de los diversos terrenos, con el fin de obtener una mejor explotación del cultivo de la caña. También realizaba pruebas de las enmiendas y abonos que resultaban más económicos e incrementaban los rendimientos de los terrenos. Además, impartía clases de Elementos de Química Agrícola y Biológica del Suelo a los alumnos de la Escuela de Agricultura y redactaba los textos de estudio de esa materia.
El personal científico que trabajaba en ambas instituciones también tenía la responsabilidad de colaborar con la revista «Chaparra Agrícola», que el Dr. Calvino editaba en esa localidad. Esta revista se encargaba de divulgar los trabajos realizados en la estación, especialmente aquellos relacionados con la caña de azúcar, aunque también se incluían otros referentes a las plantas alimenticias, al café y al cacao, así como algunos comentarios sobre nuevas publicaciones, novedades científicas, etc. Además de escribir para esta revista, Bonazzi continuó colaborando con otras publicaciones fundamentalmente norteamericanas como «Science», «Sugar», y «Journal of Bacteorology». También durante esta etapa participó en la 4ª. Conferencia Internacional de Pedología en Roma (1924) y en el Primer Congreso Internacional de Ciencias del Suelo en Washington D.C. (1927).
Debemos señalar que en aquel tiempo los ingenios Chaparra y Delicias estaban considerados como “ingenios modelo”, ya que presentaban mejores condiciones tecnológicas y sociales que la mayoría de los existentes en el país. Una muestra de esto fue precisamente la creación de la Estación Experimental y la Escuela de Agricultura, que fueron inauguradas el 20 de mayo de 19244. La escuela tenía una
capacidad de 36 alumnos menores de 17 años, con preferencia hijos de los colonos residentes en zonas cercanas. Se les impartían clases de agricultura teórica y práctica relacionadas con la caña y otros cultivos afines a la misma. Una vez terminado el curso los alumnos obtenían el título de Maestro en Cultivos5.
En 1925, a pesar del incuestionable éxito alcanzado por ambos centros, el Dr. Calvino, y su esposa la Dra. Mameli retornaron a Italia, donde resultaba
3 La Ohio Agricultural Experiment Station fue fundada en 1882. En 1892 se trasladó a su actual sede en la ciudad de Wooster. Sus investigaciones se centraban en el maíz, el trigo, la nutrición animal y la entomología. Los logros obtenidos en el mejoramiento de tierras improductivas le dieron renombre en su país. A partir de 1965 cambió su nombre por el de Ohio Agricultural Research and Development
Center (OARDC) perteneciente a la Ohio State University College of Food, Agriculture, and
Environmental Sciences. Para mayor información <http://www.oardc.osu.edu> (20 de enero 2015). 4 BENJAMÍN MUÑOZ GINARTE, La Estación Experimental y Escuela Agrícola de Chaparra, en «Revista de Agricultura, Comercio y Trabajo» (La Habana), 7, (4), 1924, pp.14-19.
5 Para mayor información sobre este tema ver CONCEPCIÓN DÍAZ MARRERO, Aportes italianos a la agricultura
de Cuba y otros países vecinos durante la primera mitad del siglo XX, in DOMENICO CAPOLONGO (a cura di),
imprescindible su presencia6. A partir de ese año el Dr. Bonazzi asumió la dirección
de ambas instalaciones. Pero la situación financiera en Cuba se fue deteriorando y para el año 1928 la compañía que administraba el central decidió reducir al mínimo las actividades de ambos centros, debido a las pérdidas económicas que había sufrido por la crisis azucarera, hasta que finalmente solo quedó funcionando, de forma limitada, la Estación Experimental.
El Dr. Ceresa fue el único italiano que permaneció en el central Chaparra7, el Dr.
Bonazzi pasó a trabajar al antiguo central Preston (posteriormente llamado Guatemala) en Mayarí, actual provincia de Holguín, con su antiguo compañero de trabajo, el Dr. Francesco Mastio. La estancia de ambos en esa región aparece reflejada en el diario de viaje de otro italiano ilustre, en este caso el destacado investigador y entomólogo Prof. Filippo Silvestri que visitó Cuba en 1928. En su diario, el Prof. Silvestri refiere que visitó las casas de Bonazzi y Mastio, situadas en el pueblo de Guaro en Mayarí, donde fue gentilmente atendido por ellos y por sus respectivas esposas8.
En el mes de diciembre de 1929 el Dr. Bonazzi fue nombrado por la Secretaría de Agricultura Director en funciones de la Estación Experimental Agronómica de Santiago de las Vegas. Según planteaba su nombramiento en el expediente personal, hasta que no se decidiera otra cosa prestaría servicios como experto químico-biólogo a cargo del Departamento de Química y Tecnología Agrícola de la citada Estación Experimental, cuidando de la reorganización de los laboratorios, específicamente en lo referido a la química biológica9.
Este centro, primero de su clase en Cuba y en Hispanoamérica, estaba situado a unos 16 kilómetros de la ciudad de la Habana y gozaba de un sólido prestigio nacional e internacional; en el mismo laboraban las más destacadas figuras de las Ciencias Agrícolas cubanas. En la Estación de Santiago de las Vegas, Bonazzi realizaría entre los años 1929 y 1934 importantes investigaciones sobre la fisiología de la caña, el arroz, el tabaco, las plantas forrajeras cubanas y la biología del suelo, obteniendo resultados reconocidos internacionalmente de gran importancia para el conocimiento de la Agricultura Tropical.
En septiembre de 1930 el Dr. Bonazzi viajó a Estados Unidos de Norteamérica, en representación del Ministerio de Agricultura de Cuba, con el fin de participar en la Conferencia Internacional de Agricultura, Silvicultura e Industria Animal, celebrada en Washington D.C. Al año siguiente, 1931, en el mes de julio, cesó en su cargo de Director en funciones y pasó a ocupar oficialmente la plaza de Jefe del Dpto. de Química y Tecnología Agrícola.
Entre los meses de abril y mayo de 1932 realizó una importante expedición al Harvard Botanic Station for Tropical Research and Sugar Cane Investigation (Estación
6 El Dr. Calvino había sido nombrado miembro de la Comisión para el Mejoramiento de la Agricultura de Italia, el más importante cuerpo técnico de la agricultura italiana de ese tiempo, y para dirigir, además, la recién creada Estación Experimental de Floricultura y Aclimatación de SanRemo, su ciudad natal. 7 El Dr. Ceresa ocupaba en el Central Chaparra el cargo de Superintendente, por lo menos hasta 1929, según consta en carta dirigida a él del eminente genetista soviético Nikolaj Ivanovič Vavilov, publicada en el libro de FRANCISCO DÍAZ BARREIRO, Nicola I. Vavilov y las primeras relaciones científicas entre la URSS
y Cuba, Ed. Academia de Ciencias de Cuba, La Habana 1977.
8 Las páginas cubanas del Diario de Filippo Silvestri (trad: DOMENICO CAPOLONGO), en «Bull. Ent. Agric. Filippo Silvetri» (Portici), 56 (suppl.), 2000, pp. 141-142.
9 (AINIFAT) Fondo Estación Experimental Agronómica de Santiago de las Vegas, Expediente. Dr. Augusto
Botánica de Harvard), situado en el Central Soledad, en Cienfuegos10, con el sabio
botánico Dr. Juan Tomás Roig y del no menos valioso Ing. Julián B. Acuña. Les acompañaba el destacado entomólogo Ángel R. Otero. En esa ocasión recolectaron numerosas especies de plantas, semillas, insectos y muestras de suelos. Otra interesante exploración se produjo en 1933, esta vez se efectuó un viaje de reconocimiento y estudio a los depósitos de turba (poner significado de turba a pié de página) situados en la Ciénaga de Zapata, la mayor de Cuba, situada al sur de la provincia de Matanzas. Allí practicó numerosos análisis de la materia orgánica depositada en el fondo de la ciénaga, materia que a su juicio constituía una riqueza potencial para Cuba, ya que esta podía emplearse como abono, combustible o para el mejoramiento de los terrenos.
En 1934 Bonazzi recibió el nombramiento de profesor de la Escuela Forestal “Conde de Pozos Dulces”, situada en los terrenos de lo que hoy constituye el Parque Metropolitano de la Habana, en el Municipio Cerro, y realizó un viaje a Panamá y a Costa Rica, con el fin de recolectar plantas y semillas, en especial variedades de banano resistentes al llamado “Mal de Panamá”.
A principios de 1935 fue designado por el Ministerio de Agricultura para organizar y más tarde dirigir, una nueva institución que estaba por crearse: la Estación Experimental para el Cultivo del Tabaco. De inmediato comenzó a trabajar en este sentido. En la Estación Experimental Agronómica se había realizado una gran cantidad de valiosas investigaciones referentes a este cultivo, que servirían de base a la proyectada estación. Se acometieron diferentes trabajos con ese fin, pero al mismo tiempo se produjeron irregularidades y contratiempos que retrasaron la materialización del proyecto en toda su magnitud. Un ejemplo de estos hechos fue reflejado en la carta que el Dr. Bonazzi envió al Ing. Gonzalo Martínez-Fortún,