37
);',-La interesante cuestion de los sucedáneos de la
quina
y la acli matacion delosquinos,
hasido y está siendo todaviaobjeto
de los estudios de una comisionespecial
compuestade los socios corresponsales
Sres. D. AntonioCipriano
Costa , D.Ignacio Pusalgas,
D. Francisco
Llagostera
, D. Juan Giné, y D. SimonBruguera
yMarti.
La
Academia,
con motivo del extraordinario uso que dealgun
tiempo
áesta parte, los médicos de variospaises
especialmente
franceses é
italianos,
están haciendo delquinoide
Armand , medicamento
preconizado
contra las fiebres intermitentes , fundado casi deunmodo exclusivo en
preparados
delescaramujo
ú rosalsilvestre,
(Ber
beris
vulgaris),
y vista laboga
que se ha dado al uso de la decoccion dehojas
delEucalyptus globulus
,adquisicion
moderna que de la Australia hahecho nuestra arboricultura , se
ocupó
1.0 enaveriguar
siera efectiva la eficacia de dichos sucedáneos de la
quina
: si aun en casodeserefectiva la virtudantitípica
dedichosvegetales,
cuyosensayos no han
podido
menos dereconocer pororígen
lapenuria
delas
quinas íntegras
y sanas en los mercados deEuropa
, sería prudente y de utilidad
práctica indisputable,
promover y amparar coneficacia nuestro Gobierno el
plantío
y cultivo, y sefialadamente delas
especies
cinchonaceas mas afines algénero Exoslemma,
en nuestras islas
Filipinas,
ya que los tantéos ypruebas
hechas en la Jamaica por los
ingleses, (justamente
alarmadoscon la destruccion devastadora de los
bosques
del Alto Perú, noreplantados
debidamente,(
38negativo debido,
segun secree, á la poca alturade losmontesde las Antillas.—Nombróse el 15 de Noviembre del ano 1865la Comisionantes citada al
objeto
deaprovechar
las luces yespeciales
conoci mientos de los senores que la componen,quienes
aceptaron el encargo de estudiar
ámplia
y detenidamente el asunto.En el informe evacuado con fecha 20 de
junio
de1866, la Comision hizo constar que, aunque por datos agenos
podia
afirmar la utilidad delguinoide
Armand contra las fiebres intermitentes , no lahabia
podido comprobar
por sí misma óen virtud dedictámen autorizado y nada
sospechoso
; así es que sobre estepunto
creía que debian mediaresperimentos
atentos y continuados paraprobar
ónegar
aquellas
virtudesterapéuticas.
Respecto
alsegundo
estremo ó sea en lo quese refiereal valorterapéutico
delEucalyptus globulus
, héaquí
lo que la Comision tuvoábien contestar :
«No esdel caso referir á esa M. 1. Academia las deliberaciones
«habidas , los informes
pedidos
á los senoressubdelegados
de Me«dicina y áotros
particulares,
y por último los datos quepersonal
«mente se
hayan procurado
los individuos deesta Comision , pues«distrayendo
desuprimordial objeto
la atencion de V.S.,
no escla«recería mas la debatida cuestion ; pero ataneá su cometido el de
«mostrar que, por los casos de curacion observados no solamente
«por
dignos
é ilustradosprofesores,
si que tambien poralgunos
in «dividuos que tienen la honra de suscribir , elEucalyptus globulus,
«aunque no
comparable hoy
porhoy
á lospreparados
de laquina
«comoantitípico
,presta
servicios incontestables cualsucedáneo,
«debiendo ser
objeto
de minuciosos y nointerrumpidos
ensayos en«cuantos afectos
nosológicos
demandarpudiesen
la indicacion deun39
)
En todos los casosde curacion hánse
empleado
lashojas
del Eu«calyptus,
ya eninfuso,
ya en deeocto ; notándose mayor eficacia en«las
hojas
caulinares ó sentadas que en laspecioladas
ó florales del«indicado
vegetal.»
«Una sola observacion , por
desgracia
sin favorableresultado,
«puede
ofrecer la Comision acerca de la tintura delEucalyinus,
pre«parado
oficina' , que aligual
que su estracto debe á la desinteresa«day
digna acogida
que mereció al Profesor de farmacia delRospi
«tal de Sta. Cruz de esta, D. Buenaventura Pau y
Negro.»
Respecto
al otropunto,
estoes , á la aclimatacion de losquinos
en nuestrasislas
Filipinas,
la Comision nopudo
contestardeun modo
categórico,
fundándose en quo «carecia dedatos suficientes acer «ca de laGeografía
botánica de dichas islascomparada
con la de los«Andes del Perúy de las montaTus de
Bolivia,
para determinar teó «ricamente si sepodría
ensayar conprobabilidad
de buen éxito la«aclimatacion de las
especies
delgénero
Cinchona que dan lasmejo
«resquinas.»
La comision hacia notaren
seguida,
«que los ensayos hechos por«los
ingleses
en laJamaica,
no han dado resultadosfavorables;
sien«do asi que en dicha Antilla se cria una
especie,
por lo menos, del«Exosternma;
cuyogénero
está mucho masrepresentado
en otras«Antillas,
lascuales,
sinembargo,
carecende cinchonas. En el Bra«sil,
no obstante, habitan variasespecies
de Exosienuna y á la vez«algunas,
aunque pocas de Cinchona. Por otraparte,
elPerú, patria
«privilegiada
delgénero Cinchona,
ofrece por lo menos dosespecies
«de Exostenuna, y finalmente nuestras islas
Filipinas
poseen una es«pecie
ó mas de Exostenana yninguna
Cinchona.»De todo esto
dedujo
la Comision que las diferencias de niveles, á/lo
)
--las
preciosas plantas
que suministran laquina;
anadiendo que, como enFilipinas
no faltan montanas,siquiera
nopuedan
compararse conlas de los Andes ,
quizás pudieran
introducirse en ciertos puntos deaquel archipiélago aquellas especies
de Cinchona quecrecen en lasmontanas
bajas
del Perú , p. e. la C. Scrobiculata II. etB.,
que nodeja
dedar buenaquina,
la C.Purpurea
B. yP.;
sin renunciartampoco
á tantear la aclimatacion de lapreciosa
C. condamineaetB. ú otras. Terminaba
espresando
el deseo muyjusto,
de que ental caso debiera
dirigir aquella importante operacion
una personacompetente delegada
por el Gobierno de S. M. y que reuniese conocimientos bastantes para
apreciar
con exactitud las condiciones climatológicas,
hipsométricas
ymineralógicas
de las localidades dondese hiciese la eleccion de las
especies,
con el fin de acomodarlas á lascircunstancias
topográficas
y demás de lasregiones
destinadas á la aclimatacion.En la sesion en que se
leyó
y discutió el ilustrado informe queacabamos deestractar, uno de los socios
pidió
la lectura de unainteresante notade Mr. Decaisne sobre «la introducciony cultivo de los
árboles de
quina,
en Java y en la India(1).
No se hallan todavía ultimados los
trabajos
de la Academia relativos á la cuestion de los
quinos
; cuando lo estén, esprobable
quereciban la debida
publicidad
ymotiven que nuestraCorporacion
tomeuna
importante
iniciativa cerca del Gobierno eneste
asunto,
cuyo interés y trascendenciason bien notorios41
)›
Con motivo de
disponerse
en la R. O. de de Julio de 1866 que nopuedan aplicar sanguijuelas
las personas que no se hallan autorizadas para el
ejercicio
de lacirujía
menor, un sócio deesta Acade mia hizo á la misma una mocion encaminada á demostrar que elbello sexo no
podrá
menosde oponer una muy naturalrepugnancia
á que ciertas
operaciones
ymanipulaciones
, seanpracticadas
porpersonas del masculino. En corisecuencia propuso se elevase una
esposicion
al Excmo. Sr. Gobernador civil de estaprovincia supli
cándole
permitiese
á lasmujeres
continuar como hasta la fecha dedicha R. 0.
prestando
aquel
servicio en determinados casos.Nombróse desde
luego
una comision para que informase sobre elParticular
cuanto se la ofreciera ypareciera.
Justo es mencionar entre las memorias y
apuntes
leidos en dife -rentes sesiones poralgunos
de los socios de número deesta Academia, los
«Apuntes
sobre laepidemia
de cólera-morbo-asiático que reinóen Barcelona en 1865 , segun lo observado en laEspana
Industrial,»
por D. Jerónimo Faraudo yCondeminas , escrito á cuya lectura
siguió
unaamplia
discusion y que mereció los honores de lapublicidad
; otros«Apuntes
sobre la vacunaciongratuita practicada
en la Academia de Medicina y
Cirujía
de Barcelona ,» por D. JuanRoquer
y Torrents , y que tambien motivaron acuerdo de que seinsertasen en « El
Compilador
médico ;» una «Relacion del análisiscualitativo del agua salio-alcalina de Sta. Colma de
Farnés, (1)
por (1) Noesposible transcribiraquíeste interesante escrito que, por otra parte,su11,
119,1.^,^1••¦•,-,1,11•110~,,,,I11,TITI."
42
D. Pedro
Rogué
yPagani;
y otra «Relacion de losesperimentos,
prac ticados por una comisionespecial,
sobre inoculacion del virus variolosoy de la materia
tuberculosa,»
por D. Francisco de PaulaCampa,
secretario de dicha comision.
Son además muchos los escritos científicos que la Academia ha recibido de sócios
corresponsales
yde otrosapreciables
facultativos queaspiraban
á serlo.Aparte
delplacer
con que laCorporacion
escuchara la lectura de dichos
trabajos,
hanla suministrado asuntospara
algunas
discusiones , y sobre no pocosrecayó
el dictamen decomisiones
especialmente
nombradas para examinarlos.Cumple
á la Academiaconsignar
aquí
un voto degracias
á lasotras sociedades científicas yá las personas que han tenido la
galan
tería de favorecerla con susproducciones.
En clase de sócio de número ha
ingresado
el Dr. D. Juan Giné yPartagás,
por su calidad de Catedráticosupernumerario
de la facultad de
medicina;
en la decorresponsales
nacionales los Sres. D. JoséCordon y Perez , D. Francisco
Delgado Jugo,
D. Francisco de P.Campa
yPorta,
D. Juan Soler yBuscallá,
D. José Oliva yCampu
riol , D. Sebastian Velilla é Inza , D. Federico Borrell , yen la decorresponsales
estrangeros el Dr.Alvarenga
y el Dr. Sandras.tativo. Del cualitativopracticado resulta sinembargoque el manantial deSta. Coloma
perteneceal cortonúmero de los que contienen el carbonato sódico. El Dr.Roguéhalló además deesta sal , ácido carbónico,carbonato calcico, cloruro cálcico y vestigiosde
sulfato cálcico;pero las sales á basetérrea están en escasacantidad,comolo demostró
43
)>»
Inútil es anadir que la Academia ha recibido converdadero
júbilo
en su seno á los nuevos sócios ,prometiéndose
de sulaboriosidad yconocimientos científicos una eficaz
cooperacion.—Empero
es sensible que casi todos los atiostenga tambien que lamentar la
pérdida
de miembros beneméritos. En 1866 tiene que llorar la muerte de dos sócioscorresponsales
: el Doctor en farmácia y Licenciado en medicina D.
Joaquin
Llorens y Cánua, y el Dr. D. RamonMiguel.
Ambos habian
prestado
á lapatria
y á la ciencia servicios no esca sos: ambosdejan
en el círculo desuscomprofesores
yamigos
y enla Academia de Medicina de Barcelona recuerdos
imperecederos. (1)
Con motivo de haber dimitido su cargo de secretario de
gobierno
el Dr. D. José Carreras y
Xuriach,
procedióse
en la sesion del 10de Febrero ánuevaeleccion , segun lo que el
Reglamento
previene,
resultando
elegido,
para lo que restaba de bienio , el Dr. D. PedroRoque
yPagani.
(1) Nosiempreleconsta á la Academia deunmodopositivo elfallecimiento desus
sócios corresponsales.—Acordóse borrar del escalafon que se publicará en 1868 á
cuantosnohayandado conocimiento desuexistencia mediante la comunicacion oficial
que deberegirentreella yaquellossegunlo que previeneel párrafo2:3, cap. 2.° del
Reglamento, que diceasí:«Podrán serlo (socios corresponsales,)todos los que envien
«á lasAcademias noticias interesantes relativas á la ciencia de curar, 6 á susausilia
«res,y quemerezcan laaprobacionde aquelloscuerpos;entendiéndose que perderán
«sus plazas, si por dos anos consecutivosinterrumpiesen toda comunicacionconla
44
)
Alconcurso abierto para la
provision
de tresplazas
de sócio numerario vacantes en esta corporacion, han
acudido,
cual suele suceder,unnúmero relativamente considerable de Doctores yLicenciados.
Siete son los
aspirantes
, yteniendo en cuenta las cualidades queadornan á todos ellos , es muy
posible
que en sudia la Academiasienta no
poder adjudicar
masplazas
que las anunciadas.Otro concurso, el de los
premios anuales,
no seha visto favorecido en 1866 masque por dos memorias.
--La que versa sobre el
pri
mer punto del programa «describir la exacta ypuntual
observacion de una
epidemia
ocurrida enEsparia
» lleva porepígrafe
:Jeté
faible
el nu d lasurface
duglobe
, hommeparaissait
creepourune destruction inevitable: lesmaux assaillaient debozales parts,
les remedes lui restaient cachés; mais it avait reçu le
genie
pour les decouvrir.» —G. Cuvier.—Suautor describe laepidemia
de fiebrevariolosa que reinó en la villa deHontoria de Valdearados , en la
provincia
deBúrgos
, desde el 5 de enero hasta el 28 octubre de1865: narralo que observó ycomo observó
bien,
sunarraciones instructiva yamena. La
memoria,
escrita con mucha conciencia y buenentendimiento,
revelaunespíritu
observador muy notable,instruccionmédica,
tinopráctico
y conocimiento de los AA clásicos. Realzaestascualidades la modestia quese
trasparenta
ea todo eltrabajo.—La
Academia acordó: 1.° conferir al autorel
premio;
2.° que al comunicarleeste acuerdo sele
participase,
parafraseando
al últimopárrafo
de lamemoria,
«que esesta muy recomendable ypertenece
al número de-10~1~111~~111,11~Tip~9~.•
<(
45)>-«dica,
yque dámuestrade los conocimientos de unprofesor
áquien
«ha cabido en suerte
ejercer
en unpueblo,
sino oscuro, cortoy poco«conocido,
desdedonde,
sinembargo,
ha acertado á estender hasta«aquí
sufama delaborioso,
entendido yesperto,
con unopúsculo
del«cual
podrán
sacaralgun
fruto los que deseenaprender.
» 3. °esti
mularle á
seguir
desempenando
suprofesion
con lainteligencia
y celoquesu
trabajo demuestra,
ysuplicarle siga
favoreciendo áestaAcademia con escritos
hijos
desu observacion ypráctica,
en laseguridad
de que serán recibidos con
aprecio.
El
segundo
temadel programa estaba concebidoen estos términos:«Responsabilidad
de losenajenados.—Determinar
si es absoluta y«completa
ó relativayparcial
=Si se admite estaúltima,
fíjense
las «formas vesánicas y circunstancias respecto á las cuales debe de «clararla elfrenópata-legista.»
La memoria compuesta sobre estepunto
lleva porepígrafe
«El inocente anteel médico y eljuez.»
Nopueden
desconocerse las dificultades que existenhoy
para resolverdeuna manera satisfactoria el
problema planteado
para el certámen.Por esto, y teniendo en cuenta la laboriosidad y demás
disposicio
nes que manifiesta el autor de la memoria , la Academia tuvo á bien
concederle el accesit ; no obstante que elasunto no
haya
sido tratado como ásunaturaleza convenia , observándose ciertavaguedad
enlas
ideas, algunos
errores en ciertos conceptos y siendo sobre todode lamentar la falta
completa
que en el escrito se nota deuna espo-sicion filosófica de los medios por los cuales se
pueda
venir en co46
)>
Hé
aquí
compendiada
en brevespáginas
la reseha de las tareasque
principalmente
hanocupado
á la Academia de Medicina y Cirujía
de Barcelona durante el alío de 1866.Impulsada
nuestraCorporacion
por la fuerza del progreso cientí fico quehoy
anima á las de suclase,
dotada de condiciones de viabilidad y animada de
aquel
espíritu
académico,
que , como dice elDr. Cil, «es un
principio inteligente
yunitivo,
que haceamable,
como«propio
de cadamiembro,
el bien comun á cuantos uncuerpo constztu«yen,» sin necesidad de ser
profeta puédese pronosticar
que al alío1866 han de
seguir
otro y otros de mas en mas fecundos para laciencia y abundantes en lustre para la Academia. No desconocemos
que la situacion anómala en que seha
dejado
á las Academias de provincia dificultará se realicen tan
legítimas aspiraciones
; pero des pues que elarreglo
de la Academia de Madrid nos hizo concebir halagadoras
esperanzas;despues
de la Real órdenpublicada
el 13 deAgosto
de1866, despues
que nuestraCorporacion
vió secundadossucelo y sus deseos
cuando,
tomando resueltamente lainiciativa,
circuló á
algunas
desuscomparieras
las bases para unproyecto
derefundicion y
reorganizacion
, si todasjuntas
reclaman delgobierno
superior
unadisposicion
que hallegado
á hacerseindispensable,
?podrán ser desatendidas hasta tal
punto
que, llamándolas todos los dias áprestar
servicios deimportancia
alpais
, no se las conceda siquiera
unreglamento
oficial ycompleto
con queregirse
?P. A. DE LA A.
El Secretario de gobierno,
ESTRACTO
ACTA DE
LA
SESION
del 21. de enero de 1867.
El Dr. Mendoza
presenta
unaproposicion pidiendo
lapubli
cacion del discurso leido por el Dr. Cil en la sesioninaugural
delpresente
ano.Acuérdase así por aclamacion unánime.
El Secretario degobierno,
~"711~~~~~1779~.-",77~T~Ti~~”...,.
QUE
EN LA SESION PÚBLICA INAUGURAL DE /16 DE ENERO DE 1867
LEYÓ ÁLA
ACADEMIA DE MEDICINA
Y
CIRUGÍA
DE BARCELONA
SU NUEVO PRESIDENTE
EL DOCTOR
D.
JO.AQUIN CIL,
Y SEPUBLICAPORUNÁNIMEACLAMACIONDEL PROPIO
CUERPOCIENTÍFICO.
BARCELONA;
ESTABLECIMIENTO TIPOGRÁFICO DE JAIME
JEPPS,
cALLE DE PETRITX0I., 14,PRINCIPAL.
M. I.
S.
SENORES:
QUERIDOS COLEGAS.
OCASION DE ESTE ESCRITO.
Con la lectura de los
importantes trabajos
académicos(*)
que acaba detenerlugar, podria
dar esta Academia porconcluidasuinaugura
cion
reglamentaria
en elariopresente.
No lo hace, sinembargo,
porque otra que, si os
pareciere graduarla
de lo que lagradúo
yo, podrémos
reputar
inauguracion
íntima y una como fiesta defamilia,
nos retienecongregados hoy
en estehogar,
favoritocentrodenuestrasconfianzas.
Yen honor de la vérdad, si nos contraemos á la
parte
que, contando con vuestro
beneplácito,
me reservé en la solemnidad deldia,
?á
qué
habeis venido vosotros??á
qué
he venidoyo?
Vosotros áoir;
é yo á deciros , en el acento de la misma ilimitada confianza quecon gusto reconozco en vosotros para
conmigo, algunos
de los senti mientos queacerca denuestra solidaria mision el corazon medicta;
y deesta suerte
leamos,
en mi frente vosotrosy en la vuestra yo, lo(*) La resena de los trabajos de la Corporacion en el al» último y el discurso
j4
4)
que
siente,
lo que leatabe sentir á cada uno denosotros, presidente
ó
presidido,
en la línearespectiva
denuestrosinequívocos
deberes.No ya de los
consignados
en artículos ó acuerdosprocedentes
de legislador
humano,
que, conperdon
sea dicho desurespetabilidad
incontestable,
por sí solos serian todos ellos letra muerta: sí de losdeberes indeleblemente
esculpidos
en el alma por el cincel incansable de la conciencia ;
6,
masclaro,
por el invisible dedo de Dios vivo.En
descargo
deuno de los deberes á que aludo yenobsequio
vuestro,
emulandoenello,
de buena gana, lapráctica
deotrascorporacio
nesypresidencias
análogas
á la nuestra,pensé
consagraros á la fazdeeste esclarecido auditorio el
presente,
familiar y amistoso escrito,
desnudo de encumbradaspretensiones.
En suhumilde condicion de
hijo
natural ylegítimo
de laespontaneidad
y el buendeseo,
no le envuelvenpúlales
de cendal ybrocado; limpios
y modestos son como lo es sucuna, como lo son suspadres:
sentáranle mál envolturas ostentosas.
PFWLUDIO.
Aquí
unpreludio indispensable. Cumplamos
conperseverancia
quienesquiera
que seamos en larepública científica,
ycon mayorescrupulosidad
los llamados áfigurar
en losprimeros puestos, aquel
deseo que elmasconsumado de los oradores latinos formulabaenestos
términos: «Lleve escritoen la frente cada ciudadano sumodo desen
tir enórden á lacosa
pública.»
Bebiendo á lasazon en fuente todavíamas pura,
purísima,
la inspiracion
denuestraconducta académica ;guardémonos
de merecerjamás, cualquiera
quefuere,
por otraparte
, nuestraposicion
en es5
)'-tas
filas, aquel
divinoreproche:
«No sabeis dequé
espíritu
sois.» De meroespíritu
humano lassentencias,
podrán
ser tésis univer-sales,
pero noirrestringibles
y menos todavíasagradas.
Delespíritu
divino son
siempre
verdadeseternas,sacratísimas,
y que no admitenrestriceion.
Así que, el deseo del Demóstenes romano me ha
parecido
buenamáxima para inserta como
epígrafe
de lo que voy á deciros.Mas,
la reeonvencionen que el Dios—Hombre hubo derecordar ásus dis
cípulos
elespíritu
de paz y amor que habia de ser norma de vidapara todos
ellos,
entrana, á mi modo dever, un interés mucho masvivo que el concepto
precitado;
mayor universalidad y trascendenciacomo lema denuestro asunto: y sin mas
preludiar,
procederé
pertrechado convuestra inestimable venia, Sehores, á
exponerle
dándole
principio
por la mascumplida
ACCION DE GRACIAS.
Elevado por vuestra
gratúita
benevolencia, SerioresAcadémicos,
áesta detantas celebridades ilustrada
silla,
nopodia
serotra, á fuerde
agradecido,
miprimera
palabra
en vuestrogremio,
que de since ro hacimiento degracias,
ni otro mipropósito
que el de corresponder,
hasta donde mis harto limitadas fuerzasalcanzaren,
á la inmere cida distincion á que osplugo
promoverme. Yoprocuraré,
pues, átodotrance que á los defectos é
imperfecciones,
que soy elprimero
enreconocerme, no se
allegue jamás
aquel
fondode altivezesquiva,
avasalladora,
ó mal sufrida que, cuando no deintento, siquiera
porel
resultado, ejerce
en los debates académicos unapresion
incompa
tible,
si lashay,
con elespíritu
conciliador ytemplado
que animósiempre
y sinexcepcion
á todos misdignísimos predecesores
; que átodos los ilustres miembros de nuestra centenaria
corporacion
anima: yen este
particular, abrigo
el convencimiento masprofundo
deque á
ninguno,
como alpresidente
, conviene para sípropio
no ménos que para
ejemplo
de losdemás,
inspirarse
en eseespíritu
que lo es del cuerpo científico cuyossufragios,
y no lleveis á mal que lodiga,
levantáronle sobre sus hombros por cabeza.Peregrina,
segun áquien, podria
parecer laimágen
, que no ávosotros.
Explicaré,
sinembargo,
el símil que acabo de proponeros; y no porquejuzgue
yo que hateis menestersemejante explicacion,
sino porque á mí mecumple
dárosla, para que veais si concuerdacon la que le diere vuestro
aventajado
criterio. Y es que, enpuri
dad de verdad, á
semejanza
decomo aconteceen lasrepúblicas
políticas,
donde elsufragio
popular
eleva yconstituye
en cabeza deellas áuno de los
ciudadanos,
acaso decondicionhumilde,
solo por que lereputáron
identificado conelespíritu
nacional ; así tambienvosotros, por haberle estimado devuestro mismo
espíritu
(no puedo
interpretarlo
deotro modo),
constituísteis en el puesto delapresi
dencia á uno quese confiesa de buen
grado
el rnénos benemérito deentre vosotros, bien que no el ménos solícito en alimentar dentro de
su
propio
seno elsagrado fuego
de eseespíritu
que centellea inextinguible
en vuestrospechos.
Adivinais de cuálespíritu
os hablo?—De el
ESPÍRITU ACADÉMICO.
Hé
aquí, Seiíores,
héaquí,
amigos mios,
el asuntoprincipal
delas sencillas cuanto
rápidas
consideraciones que, ni por un momento lo
dudo,
acojerá
benigna
vuestraprobada
gentileza
, recibiéndo.<(
7fesion de
fé;
comoprenda
de unánime armoníaentre todas lasdignas
y muy
dignas
individualidades que forman estacolectividad ilustre ála cual
hoy
por vezprimera tengo
la inmerecida honra dedirigir
lapalabra
desde el sillonpresidencial.
Es todo lo que vais áoir,
, y,despues
de rogaros con encarecimiento que no leatribuyais
otra importancia,
paso á darme cuenta ydárosla,
porque os ladebo, pri
meramentede lo que entiendo yo por
espíritu
corporativo
;luego,
de cómoconcibo,
porconáiguiente
, elespíritu académico,
en interés, ósea,con
oportuna aplicacion
ácorporaciones
de la índole de la nuestra y, por el mas
lógico
de loscorolarios,
á lanuestramisma. Entiendo porespíritu
de cuerpoaquel
principio
inteligente
y unitivo, que hace
amable,
comopropio
de cadamiembro,
el bien comuná cuantosun cuerpo
constituyen. Inteligente,
porque es destello de.larazon :
unitivo,
porqueesvínculo de voluntades.Inteligencia,
conspiracion
de facultades yafecciones, aspirantes
áun solo finperfec
tamente conocido y abrazado con calor. Por sunaturaleza de inteli
gente
yunitivo,
esprincipio
de vida para todo cuerpo de humanaagrupacion
que le posea, enigualísima
conformidad que es el almaprincipio
de vida para el cuerpo de humanaorganizacion
subordina do suyo.Aparece
á losojos
decualquiera
despreocupado
entendimiento esaconformidad,
paralela
y evidente en altogrado,
imposible
como esel desconocer que, si la
separacion
del almadeja
cadáver el cuerpo que, miéntrasestuvo unido á ella, fuéorganismo; así, punto
porpunto,
la ausencia delespíritu
que leperteneció,
deja
enestado cadavérico á la
agrupacion
que en horaaciaga
leperdiera.
Podrá—i,
porqué. negírlo
?—un cuerpo moral óanimal,
queaquí
el nombre esindiferente;
embalsamado en todaregla,
coloridocon-"(
8drá, digo, semejar
á un cuerpo vivo; mas no lo será nunca en realidad,
á nocomunicarle un nuevosoplo
de vida laOmnipotencia.
Interin el
milagro
no serealice, será,
todo lomás,
aquel
cuerpo loque la tierra
caótica; inerte, infecunda,
ántes que sobre las aguas que la envolvian tendiera sus alas elespíritu
de Dios:ó,
en otrostérmi nos; lo que el limo amasadoen formadecuerpo
humano por la diestradel Altísimo; masa
inactiva,
sinexpresion
nimovimiento,
hastatantoque el divino Artífice le hubo comunicado el aliento vivificador. Ello no admite
réplica
; los hechos de la vida individual se reproproducen
por ineludibleley
en la vida colectiva; no de otra suerteque los
pertenecientes
á lacolectiva,
resumidos se historian y delilineanen la individual. Tan incontestablemente como todo eso se ha
llamado microcosmos al hombre
personal,
6,
comodinamosen nuestro romancecastellano: «miniatura del universo.»
En fuerza deuna tan luminosa
semejanza,
varian hasta lo infinito, es
decir,
en indefinidaescala,
losgrados,
matices y atributos asíde los
espíritus
como de los cuerpos; bienconstituyan
estos y aque llos individualidades ó colectivádades.Ocupan
por lo tanto, en buen derecho decategoría
gradual
, lacumbre de la escala
respectiva espíritus
y cuerposprevilegiados:
si,privilegiados
; no porinjusticias
6 veleidades del favor 6 de la fortuna, ántes por la
propia valía, pujanza, virilidad,
iniciativa y robustez á
prueba
de vicisitudes ycontratiempos
; 6 tal vez por una potente
longevidad siempre
juvenil,
acreditada deinvulnerable,
aún álos mas
aguzados
yponzonosos
dardos de lamalquerencia
; á todoslos aríetes de la masarrolladora sana.
Diríase que para cuerpos y
espíritus
detan aceradotemple,
detan
privilegiada inquebrantabilidad,
no tiene eltiempo
hálito que losempane,
segur que loshiera,
acometida quo losataje,
rueda que los9
);-arrolle,
vaivenque losdesconcierte,
vórtice que losconfunda,
ponzonaque los
atosigue,
estrechez que losahogue, pesadumbre
que losderribe, terror que los apoque, altura que los
desvanezca, precipicio
que losderrumbe,
sima que los trague.Ahora bien:
?qué
cuerpo,qué
espíritu
individual??qué
espíritu,
qué
cuerpo colectivo noquisiera
serasí? Personalidad ó colectividaddestituidas de esta que
podemos
apellidar
aspiracion universal, ingé
nita,
indefectible, á la mayor suma deperfecciones
yprendas
talesque afiancen una existencia
siempre incólume, vigorosa,
rozagante: sociedad ó
individualidad,
indiferentes áesa vitalaspiracion,
imperecedero
latido de nuestrainmortalidad,
habrianabdicado,
á losojos
del buensentido, todo derecho áfigurar
con honra yhasta el de llevar el nombre deentidadpersonal
ó social: nombre y derecho áque habrian renunciado con tan
estúpida apatía.
Ensemejante
estado(pasadme, Senores,
laexpresion),
por masque sefingieran
entidadesvivas, seles
podria
tanerámuerto ..Serian,
ádespecho
desufingida
vitalidad,
un merocapul
wrluum deprocedencia
humana.!Bien
hayas, preciada
Academia médica deBarcelona,
quejamás
experimentaste
en tu cuerpo,gracias
ánohaberlapadecido jamás
entu
espíritu—que siempre
eselespíritu
suprimera
víctima—tan lastimosa decadencia: un estado de
negacion
tan miserable : tan insensata anulacion de sí mismo ! !Así se
verifique
en tuespíritu—que
síse
verificará—aquel
principio
de verdad histórica de que alpasado
responde
elporvenir
!Tu presente—vasin
lisonja—promete
no desairar el recordadoprincipio.
Laenérgica
virilidad deespíritu
académico que telegáron.
tusprogenitores,
véolacon sumacomplacencia
miaresplandecer
entí,
fomentada con empeno en direccioncooperativa
y adecuada á laprudente progresion
del órbecientífico,
y á lo que tiene de ordenado-;(
loy magestuoso el avance social
contemporáneo.
Yo tefelicito deco razon .Mas, puesto
casoque átupresente,
nadie leimputará
con razonque desdice detu
pretérito; ?podria
adinitirse comoposible
que átuglorioso pasado
viniesealgun
dia áempanarle
un sombrío venidero?Todos á una voz
opondríamos
á talhipótesis,
idénticanegativa.
Vivamos, sin
embargo, siempre alerta,
que por muy firmes que nosconsideráremos,
para todo el mundose dictóaquella
sapientísima
advertencia: «El que está en
pié,
veade no caer.»SUICIDIOS
Tomemosahora
consejo
dela muerte, que no es ella malaconsejera
delos vivos.Habrá alrededor detres anos, vinieron dos ruidosos suicidios á
acrecentar la
plaga
y por demás pavorosa cifra que de ellos está sufriendo con indecible ysangrienta
humillacion por mal de sus pecados la sociedadmoderna. Durante el corto
espacio
trascurrido entreuno y otro
atentado,
alsegundo
de los suicidas,'poco
antes deserlo y sin él
sospechar
quedentro demuy poco loseria,
se leoyó
extranar y condenar con el
aplomo
de lacordura el ominoso arrebato del
primero,.. ;qué
leccion!!Hartose os
alcanza,
Senores mios y mis estimadoscolegas,
cuánprovechosa
instruccion encierra para todos elejemplo
referido, noménos para
agrupaciones
que para individualidades ; comoquiera
que,
igualmente
que el yopersonal,
puede
el yo colectivo obcecarsehasta
degenerar
en suicida.Si sendas estadísticas se han escrito y
pluguiera
á Dios que no se(
suicidios
individuales; buenas,
sinomejores
y-
por ventura de mastrascendental ensefianza que las
antedichas, podrá seguirse
escri biéndolas de suicidios sociales en la masamplia acepcion
deestavozcalificativa. Y serán de ver allí
asambleas;
corporaciones
dediversorango;
organizaciones literarias, civiles, militares, teúrgicas
familias;
estirpes
; nacionalidades;imperios
y sabe Dios cuántasotras más instituciones
desaparecidas,
ora por habersedejado
morirellas
propias
, ora por haberse ellas mismas asesinado ; que todoviene á ser uno : suicidiosde distintos
géneros,
pero suicidios al fin.?Atinais
porqué
razon, á la par queunindividuo, puede
una asociacion perecer suicidada? Es muy
sencillo.—Porque
la mismísimadegradacion, igualísimademencia puede
herir demuerte, con lentitud 6 de un
golpe,
indistintamente á laprimera
existencia que á lasegunda.
Trabajados
encualquiera
de ellos por idénticadepravacion
elcuerpo 6 el
espíritn
que lasintegran,
vienen estos dos elementos de la humanidad y se dicen á la vez con criminalcobardía,
cuando no conhorriblefrenesí,
lo que conpatriótica
resolucion y levantado alientodijéranse
el uno alotro los dosinseparables amigos
y conm'nones de la epopeya
troyana.---«Muramos
juntos.»
Admitida una vez, Seriores
Académicos,
laposibilidad
de tan doloroso cuan
repugnante
acontecimiento para nuestra amada corpo-racion ; y convencidos á un
tiempo,
y átiempo,
todos nosotros,miembros suyos, de que tambien
pueden
labrar en su senopasiones
aviesas que la
turben, desordenando, depravando
suespíritu
hastael extremo de atentar contrasu
vida; atajémoslas
áporfía imposibi
litando de comun acuerdo sus azarosos arranques; y oportunamente nos
opondremos
á susesplosiones
ó lasconjurarémos
alestallar,
42
gua ni
contemplacion,-
primero
ante el foro de lapropia conciencia,
y
luego
1 la vez ante eljurado
delespíritu
académico.La libre y razonable inmolacion del
espíritu
individual áeste espíritu
corporativo;
vedaquí
el mas robusto vínculo de órden y enconsecuencia, de
longevidad
áprueba
deachaques
crónicos é agudos,
para todo cuerpomoral;
y mil vecesmás para el nuestro, consagrado
como está por institucion á incesantes estudios sobre la vida y susdespojos,
sobre la muerte y sus estragos.Sepamos
hacer, encualesquiera tiempos
ycircunstancias, aquella
inmolacion generosa, fortalecer
aquel
lazo armonizador; y entónces
;oh
!entónees,
no darétnosjamás
ni pretextosiquiera
á eseprofano vulgo
que circula umbrales á fuera de estepaladion
de laciencia,
para que nos lastime el corazon y nosultraje
conaquella
manoseada
reconvencion,
masque sarcástica en sulengua:
«Cúratemedico á lí mismo.»
PRESERVATIVOS.
Significado queda
en lospárrafos
anteriores quecuando,
segunaquí sucede,
trátase de cuerpos que tienen su razon deser cifrada en elespíritu,
no todo se reduce á no atentar en una forma violentaco,ntrasu
propia
vida. Y tanto ménospodrá
el solo abstenerse de tamana violenciaalejarlos
de morir porculpa
suya, cuanto mas nu merososfueren sus miembros ó másimportante
el destino que losenlace y
unifique.
Cuerpos
de índole tanelevada,
lopropio pueden
perecer deuna manera subitánea quepaulatina;
detemprana
que detardía, pero
siempre
voluntat ia yculpable
muerte; sea que ocurriere conestrepitosa instantaneidad,
ó que se caminare áella,
pasoentre13
paso, por
parálisis,
porletargo,
por inanicion ó pormarasmo y consuncion de
espíritu.
No ha
permitido,
nopermitirá
el cielo que á nuestracara Academia la lleve al
panteon
de la Historianinguno
de los senalados de sórdenes:nó,
no habrá desórden que lapueda
lanzar á latumba,
mientras que á cada uno de ellos le
hagamos
frente con los preser-vativos más adecuados y oportunos.
Enesteconcepto, evitarémos la
parálisis
académica,
con la sostenida,
ordenada ydiligente
actividad del amor á la ciencia y ásusaplicaciones,
conduciéndonos comocumple
á obreros que somos dela
inteligencia
y ministros de lahumanidad;
en la firmepersuasion
de que la actividad serena y
reposada
anduvosiempre
renida conaquella
inmovilidadharagana
queesengendro
de la inercia intelectualdel sentimiento moral
entorpecido,
cuando no de entrámbas cosasNos
apercibirémos
contralainanicion,
ofreciendo á nuestra mente, con mano sobria y
templada
mesura,manjares apetitosos
y nutritivos,
de doctrinasaludable, fecunda,
interesante en los dos respectos
especulativo
yexperimental.
Alejarémos
la sonolencia precursora delletargo
, con sus maseficaces
dispertadores;
es decir con la noble y leal emulacion en losrecíprocos
esfuerzos por adelantar sinperder
terreno ; y con la selecta,
útil ygrata
novedad en los asuntosabiertos algusto
y albedríode la
corporacion
ó dealguno
desus asociados.Harémos
imposibles
el marasmo y consuncion deespíritu,
comunicando
expansion
y tono , calor ynervio,
animacionconcertada,
agradable
colorido ánuestras sesiones y á su fisonomía ; cerrandoademás,
y bien atrancada lapuerta,
dado que intentaranpenetrar
aquí
—queno intentarán— á toda grave
demasía,
á toda bastardaparcia
lidad,
á toda intencionadadivergencia
quepropendiese
6 fuera capaz)2
de hacer el vacíoen medio denosotros, desnaturalizar la atmósfera saludable que
respiramos,
atacarde disolucion y muerte las fuerzas académicas.Que
nopueden
éstas subsistir á manera de masas populares,
traidas yllevadas,
deshechas y rehechas ó acaso contrahechas,
á voluntad de malsinesagitadores.
Nuestras
fuerzas,
sihemos dedar cima feliz ála mision que noshermana, solo un
pábulo
tienen;
elpábulo
delespíritu;
la ciencia:más,
no una cienciabastardeada, sofística, petulante, hueca,
descreida,
mordaz yrevoltosa;
fómite de sériosdisgustos
y desavenencias interminables: sí
aquella
ciencia que infunde modestia y cortesía; prudente, razonable,
pacífica,
tolerante por caridad y companerismo,
aún en medio de las lides que hubiese de renir y que noesquiva jamás,
pero que noacepta
nunca en el terrenode las personalidades,
á que se deshonraríadescendiendo;
sinoúnicamente en elnoble
palenque
de losprincipios,
en defensa de la verdadimpug
nada.
Que
tansagrada
es la verdad á losojos
de la ciencia celosa desubsacrosantos
fueros,
como á losojos
de bizarro campeon la banderaquetiene
jurada:
como essagrada
á losojos
de damapudorosa,
lavindicacion desuhonrazaherida 6 villanamente
puesta
en duda.Todas las causas de muerte, en cuya
consideracion,
Senores ycolegas,
acabais deacompanarme con unapaciente
y bondadosaatencion,
que no sé cómoagradeceros;
causascomunes, por lo demás,
ácualesquier espíritus
ycuerposcolectivos;
si estudiamos ápriori
sugenealogía,
reconocerémossin dificultad que todasellas,
ó presuponen, óacarrean unanegacion funestísima, gérmen ésta,
ásuvez, ó fruto mortífero para
quien quiera
queexperimente
en sí propio
supernicioso poderío.
Ignoro
si ossorprenderá,
aun cuando15
Pues
bien;
esanegacion malhadada, ponzonosa
,degradante
yhomicida para todo cuerpo, como para todo
espíritu
deasociacion,
es la falta de entusiasmo. En nuestracorporacion
la llamaríamosfalta de
ENTUSIASMO CIENTÍFICO.
Segun
estudiamos el entusiasmo en las distintas esferas en quepueden
asombrarnos susoperaciones
ó los diferentes rasgos inherentes ásu índole
especial,
al mismo paso se nos dá él á cono cerbajo
distintos nombres y por fenómenosigualmente
especiales
que le calificany retratan.
Así,
en la esfera civilproduce
elcivismo,
queconstituye
en unasolay bien avenida
familia,
unida por la más unánimey generosaaspiracion
al bien comun, á los que moran en unmismopueblo.
En la
Religion verdadera,
esaquel
santo y heróico celo que seinmola por la
gloria
de Dios y el bien de las almas.En
política,
enciende yatiza elpatriotismo,
centella del amor nacional, potente
para purgar de escoria lasociedad,
consumirpatrió
ticas
bastardías, aniquilar
enemistades y facciones , propagar deconfin á confin la concordia permanente; única que sabe hacer el sa
-crificio de efímeros y baladíes intereses en aras del supremo
interés,
el de la madre
patria.
En la
milicia,
el entusiasmoengendra
la bravura delsoldado,
que, alarrojarse
sobre hombres ymáquinas
que tiran á matar, no tantoobedece á la senal deataque, cuanto á la voz y
espuela
del corazonque le dice, sin darle paz ni tregua:
!adelante!
Es,
en lamarina,
el entusiasmo el que hace del hombre de mar uno como_penasco escueto, orondo,
tranquilo, inquebrantable,
aún16
cuando mas azotado se
contemple
por los huracanes y las olas entumecidas,
óexpuesto
á los horrorosos ylúgubres
azaresde-una batalla naval.
Y
bien;
lo que en otrosgéneros
de entusiasmo es serenidad imperturbable,
arrojada bravura,
generosocivismo, patriotismo
acriso lado, celodevorador....;
en el órden científico?qué
será?Es,
no lo demosjamás
al olvido : esaquella
lucidezdifusiva,
radiosa,
intelectual y afectiva; luz deluz,
luz verdadera de luz verdadera,
que de Dios Padre de las luces viene y á Dios lleva ; luzpenetrante
y amable ásemejanza
desumanantial ó foco divino. Lucidez,
que cuanto mas soderrama; cuanto á mayorespacio
sedifunde,
ó masprofundas
tinieblasilumina,
otro tanto gana enrefulgen
cia;
tanto mayorenergía
vacobrando;
contal,
empero, que los horizontes que alcanzare á
descubrir,
por muy dilatados quefueren,
los refiera y subordine alPrincipio
eternal é inaccesible de toda verdadera
luz,
infinitamente masdilatado que los mas dilatados horizontes.Generacion fecunda del
espíritu
de todo bien , el entusiasmo deque
aquí
se trata , afine ,inseparable
de lamagnanimidad
; nohay
cosaque
empequenezca:
ántes loengrandece
todo ; sin por eso tocar nunca en los límites de una insana
exageracion
,gemela
de lamentira y, por
ende, enemiga
de la verdad. Sí, de la verdad, quelo somete todo al inexorable
compás
de la exactitud y lajusticia.
Merced á estas sublimes cualidades, hácese el entusiasmo generador de los
granden caractéres;
incentivo y acicate de las mas sorprendentes
y fructíferasacciones;
autor y actor decuanto eltiempo
presente califica,
ó calificará laposteridad
, defastuoso,
monumental y
gigantesco
en las letras como en las artes ; en lasleyes
como en la historia: en los triunfos yconquistas
inefables de la paz, cual en los dolorosos ysangrientos
de la guerra.-°,-•(
L-
)>,-Antorcha encendida es el
espíritu
, luz viviente : el entusiasmosano y puro, es del
espíritu
el nítidofulgurar
; supalabra
de fuego,
ignitum eloquium
; capaz de enardecer á los mas tibios é indolentes.
Ved, sino,
sus obras.En boca del
apóstol
,prende
la llama de la caridad en el mundo.En los labios de animoso
capitan
, hinche de indomable bélico ardor las huestes. En el arenga de
fogoso patricio
, saca tal vez delilotismo y la
abyeccion.
á todo unpueblo,
trocándole, cuando no enpueblo-rey,
en unpueblo-rayo,
vindicador en la manos del Omnipotente,
desudignidad
y honra maltratadas.Finalmente,
y eslo quemas decerca nos incumbe : en toda doctrina radiante de vivísimo interés ordenado por la verdad y á la ver
dad,
que en susráfagas
ó luminososprincipios resplandece
; el entusiasmo atrae, gana ,
conquista
,sojuzga, cautiva, aprisiona
, ácuantosposeyeren
capacidad
intelectual ymoral,
suficiente para entender al que les habla yabrazarsus mirascon el
ardimiento,
conladecidida voluntad de
quien
se las comunicaenaltecidas,
arreadas enlos
riquísimos
atavíos de la bondad y la belleza verdaderas.Tan cierto es é incontestable queen el orbe científico , ni más ni
ménos que en todas
aquellas
esferas en que seespacia,
evoluciona y seengrandece
laporcion
activa de la humanidad, tienen ásu modocabida fervorosos
apóstoles,
denodadosadalides,
repúblicos
eminentes,
intrépidos
argonautas.En
primer
término desusglorias
enaltece el entusiasmoreligioso
á un San Pablo : el entusiasmo militar á un Julio Cesar : el entu
siasmo
político
á un Gimenez de Cisneros : el entusiasmo civil á unFivaller : el entusiasmo naval á un Colon : el entusiasmo
popular
áun O'Connell
mero que
registra
en todos los estados sociales , en todas las gerarguías
y en uno y otro sexo , ?áquién
ha levantado sobre elpavés
de lainmortalidad histórica el entusiasmo universal? Al
incompa
rableHIPÓCRATES.
Suya
es la venerable y áticaefigie
que desde la modestaménsula,
dó latenemos colocada;
preside
á esta mesay , lo que masdice en suloor,
á la cienciamisma, dignamente
aquí
representada
en nuestras asambleas. Y no sin fruto, no sin
significado.
Nó , Senores Académicos.
Fructuosa, significativa
hastala sumo,es y debe ser su
presidencia
para nosotros.Nadie suponga que
haya
ópueda
haber para nosotrosen esebustounmito
supersticioso,
un idolillodoméstico,
uno de losantiguos
Lares, un trozo de mármol divinizado por elpaganismo.
No somosacá,
por la
gracia
deDios, idólatras,
ni tampoco iconoclastas.Es que vemos al través deesa
imágen algo
y muy mucho másquela materiaestatuizada: vemos el
espíritu
religioso
yregenerador
del
Original;
razonador pero noracionalista: elespíritu
eminentementeobservador y
práctico
; entusiasta ysiempre
acendrado cultivadorde laMedicina
experimental
y racional á la vez: filosófico , pero nosofístico ; conservador pero no estacionario. Vemos el
espíritu
que almodelo vivientede tan
expresiva copia,
en todas susobras le dió áco nocer como á reformador, perono de los depiqueta
en mano.Aquel
espíritu,
enconclusion,
que le mereció elglorioso
nombre de Padredela Medicina, ratificado ya por veintidos
largos siglos,
mal que les pese á detractores ilusos.49
)-macion por la Academia de tan ínclito y venerando
presidente
?Significa
, senores , que no somos acáhijos
degenerados
de taninolvidable Padre.
Que
eshipoci
áticoen la ciencia nuestroespíritu;
hipocrático
el entusiasmo científico que nos sostiene yempuja
adelante en nuestro
camino;
que nos continuaráempujando,
á no suceder,
ynosucederá,
que en hora para nosotrosmenguada
renegáse
mos el blason detan
legítima
yegregia paternidad,
declarando decaidasu,
aquí grandemente
simbólica,
presidencia.
Nadie masinteresado que nuestrocuerpo académico en que no suene
jamás
hora tan infausta.Léjos
de nosotros tamanaingratitud
y tan
imperdonable
desafuero.Creo,
pues, en esta ocasioninterpretar
conlamas fiel exactitud elsentimientoen que todos
abundamos,
al asegurar que todos y cadaunoconservarémos
siempre
vivazen nuestrosenoaquel espíritu
apasio
nado por la
ciencia,
que nuncapadeció
menoscabo en el oráculo deCes,
ni sé lapesadumbre
de los arios en la extrema senectud.Así,
enposesion
perenne delespíritu hipocrático
,jamás
se nospodrá aplicar
conjusticia aquel
divinoreproche
: «No sabeis de queespíritu
sois.»Barcelona16 deenero de 1867.
CARGOS
ACADEMICOS
Y COMISIONES
PERMANENTES
E 1.417c I.S 6 .
Presidente
Secretario degobierno . . .
Secretario decorrespondenciasextrangeras,
Bibliotecario archivero D. D. D. D. D. D. D. D. D. D. D. D. D. mama~laca. Wenceslao Picas. Antonio Mendoza. José Bremon. Juan Magaz. Nicolásfloms. POLICÍA MEDICA. JustoEspinosa. Ramon Torent. José de Lelamendi. MEDICINA LEGAL.
Ramon FerreryGarcés. Pedro Rogué yPagani.
Emilio Pi y Molist. Narciso Carbó. Juan Giné. El Vice-presidenteprovisional, -hondero 3uanich. COMISIONES PERMANENTES, Barcelona 31 de Diciembre de 1866. D Joaquin Cil. D. Eduardo Bertran. D. José Carreras. D Jerónimo Faraudo. D. D. D. TOPOGRAFÍAS. BenignoArmendariz. Jerónimo Faraudo. JoséMaría Puig.
VACUNACIONGRATUITA.
Juan RamonCampaner. Juande Ruin.
JuanRoqueryTorrens.
AGUAS DIINERP.LES.
D. Francisco Juanich. D. Carlos de Siloniz. D. Luis CarrerasyAragó.
El secretario degobiernoprovisional,
ESCALAFON
DI
LOS SS.
ACADEMICOS-
DE
NÚMERO.
1 D. Francisco Juanich. D. Vicente Grasset (jubilado).
2 D. Ramon Ferrer y Garcés. 3 D. JoaquinCil.
D. Francisco de Paula Folch ,jubilado).
4 D. Wenceslao Picas. 5 D. Antonio Mendoza. 6 D. Carlos de Siloniz. 7 D. José Bremon. 8 D.BenignoArmendariz. 9 D.Jerónimo Faraudo. 10 D. JuanMagaz.
11 D. Juan RamonCampatier.
12 D. Pedro Roquey Pagani.
ESCALAFON DE LOS SS. SOCIOS CORRESPONSALES
1 D.Joaquin Pascual y Rabell. 2 D.Francisco Colom yCosta. 3 D.Antonio Gili yFerrer. 4 D.Manuel Gil y Aheniz. 5 D. PedroMarquésy Quinta.
6 D.Pablo Olivé y March. '7 D.Nicolás Blanch. 8 D.Martin Rodon y Bel!. 9 D. Serafin García. 10 D.Alfonso JeMaría. 11 D. Juan Blasy Cardona. 12 D.Rafael Ilernandez. 13 D. Juan Risueno. 14 D. Pedro Rabasa.
35 D. José CalasanzTutti.
j'(
2)'5.
ESPANOLES.
13 D.Emilio Pi y Molist. 11 D. JustoEspinosa 15 D. Juan de Rtill. 16 D. José María Puig 1'7 D. NicolásHoms. 18 D. Ramon Torent. 19 D. Narciso Garbo. 20 D. José Carreras. 21 D. José de Letamendi. 22 D. JuanRoqueryTorrens. 23 D. Luis Carreras y Aragó. 21 D. EduardoBertran. 25 D. JuanGiné yPartagás.
16 D. José Antonio Coll. 17 D.Manuel Coll Gonzalez. 18 D. JoséAntonioPavon.
19 D. José Ráfols y Alba. 20 D. Francisco Llombart.
21 D. José María de Aguayoy Trillo. 22 D.AntonioGarcía.
23 D. Alberto Francas y Vilella. 24 D. José Torresde lbanez. 25 D. Sebastian Florit.
26 D.Tomásde Amezqueta.
27 D.Pedro Francisco Domenech. 28 D. José Suriá.
29 D.Francisco Alonso y Fernandez. 30 D.ManuelRodriguezy Caramazan
31 D. José Furiós.
32 D. Pelegrin Ciriaco Pagésy Escolá. 33 D. Juan Montes. 31 D.Agustin Ferrer. 35 D.IgnacioMiguel. 36 D. José Tapies. 37 D. José Ferrer. 38 D.DomingoPrat.
39 D. Juan de laCruz Ferrater. 40 D. José Pujol.
41 D. José Rafelsy Adell.
42 D. Luís María Ramirez ylas.CasasDeza. 43 D.Antonio Balaciart.
41 D. Juan Manuel Ballesteros. 45 D. Ramon de laSagra. 46 D. Ranion IsaacLopezPinciano. 47 D.MarianoJoséGonzalezy Crespo.
48 D. Víctor Gonzalez. 49 D. Joséde la Pena. 50 D.Joaquin Exiraeno yRoyo.
51 D. Sebastian de Mesa. 52 D.José Faura.
53 D. José María Santucho y Marengo.
51 D.IgnacioMiguelPusalgas y Guerris. 55 D. Francisco Gelabert.
58 D. VicenteAsueroy Cortazar. 57 D. Valentin Luis Coll. 58 D. Tomás Mir.
59 D. José Oriol Ronquillo y Vila. 60 D. José Baroy.
61 D.José AntonioMartí y Fonseré. 62 D. Antonio Domenech.
63 D. José Saladrigasy Talavera. 64 D. JoséFerrery Garcés, 65 D.Luis Omsy Garrigolas.
66 D.Bernardo Sentís. 67 D. José Oriolnueras. 68 D.Tomás Santero. 69 D.Gregorio Escalada. '70 D.Luis Martinez yLeganés.
71 D. JuanCastelló yTagell.
72 D. Tomás de Corral yOna. 73 D. Melchor Sanchez deToca. 74 D.Gabriel Usera. 75 D. MatíasNieto. 3
)>''.
'78 '79 80 81 82 83 84 85 86 87 88 89 90 91 92 93 94 95 96 9'7 98 99 100 101 102 103 104 105 106 107 108 109 110 111 112 113 414 115 D. Patricio Salazar. D. Luis Colodron.D. Franciscode PaulaGarcía. D. RafaelSaura.
D. Pedro Mata. D. SerapioEscolar.
D. LorenzoSanchez y Nunez. D. Francisco Gonzalez y Garrido. D. Ricardo Bernardez.
D. José Benito Garcíade Castro. D. AgustinGonzalez y Garrido. D. Rosendo Fonteula.
D. EmilioComnes-Gayy Pulleiro. D. José Tort.
D. Francisco Javier Peon. D. LuisFragayFajardo.
D. Estanislao Pau y Recalde. D Francisco Ruvino. D. SimonBruguera. D. Manuel Ruiz Salazar. D. Bonifacio Carbó. D. José Villar y Macias. D. JoséBerreray Ruiz. D. Salvador Triter. D. JoséJust.
D. Ramon Font y Roura. D.ManuelMaten yFort. D.Rafael Eurasy Escofet. D. Juan Sanllahi.
D. Francisco de PaulaIsern. D. Sandalio Palomino. D. Francisco Castellví.
D. Bonifacio Gil yRojas. D. Onofre Gonzalez. D. MiguelPonsy Guirnerá. D. Antonio Mártrus. D. JoséMaríaOrtega.
D. Andrés Ilernandez y Guaseo. D. Francisco Arró yTriay. D. José Antonio Giró. 116 D.Antonio Pujadas.
117 D. JoséAntonioReynés.
118 D.José RodriguezCaballero. 119 D. CayetanoBalseyroyGoicochea.•
121 D.Francisco deBorja García Blanco 122 D.Pedro FelipeMontan.
123 D. Rafael Benet. 124 D. CarlosMontagú. 125 D. Pedro Pujadory Graells. 126 Excmo. Sr. D. Pedro MaríaRubio. 127 D. Ramon Ilernandez Poggio. 128 D. Joaquin Serra y Pucurull.
129 D. José SecoBaldor. 130 D. ClementeCampá.
131 D. José M. G. de laCotera. 132 D. AntonioBajesyTorroja.
133 D. José Montada y Bordas. 134 D.Fernando Weylery LaviRa. 135 D. JoaquinSalarich.
136 D.Vicente de Ribas. 137 D. RamonMarqués y Matas. 138 D. Juan BautistaPared. 139 D. José Porcalla yDiomer. 110 D. Juan Marsillach y Parera. 141 D. Francisco Mendez Alvaro.
142 D.Antonio Corbella y París.
1 DoctorClot-Bey. 2 Kuknhollz 3 Juan Parkin. 4 Viader. 5 Ducros. 6 CayelanoGarvizu. 7 Dnpierris. 8 Lafosse. 9 flipólitoCombes. 10 Jacquier, 11 Humbert. 12 Koscia-Kiewicz. 43 Juan Epps. 14 Carlos Chantry. 15 James. 16 BenitoTrompeo. 4 113 D.Antonio Coca.
114 D. Aureliano Maestre-de San Juan. 145 D. José Salvador Ruiz.
146 D. Tomás Parraverde yAguilar. 147 D. BaudilioNety Figueras. 148 D. Juan Creus y Manso.
149 D. Simon de RojasBruguerayMartí. 150 D.Joaquin Ferrandis y PifIol. 151 D.Francisco Llagostera y Sala. 152 D.Mariano Ruizy Jara. 153 D. EudaldoRaguer.
154 D. AntonioCiprianoCosta. 155 D. Julian Herrero. 156 D. José Cordon y Perez. 157 D. Franciso Delgado Jugo.
158 D. Alfonso Ribell.
159 D. Francisco de PaulaCampá y Porta. 160 D. Juan Soler y Buscallá.
161 D. Sebastian Velillaéfnza. 162 D. Federico Borren.
163 D. Pablo Velasco y Canuencia.
ESCALAFON DE LOS SS. SOCIOS CORRESPONSALES
ESTRANJEROS17 Juan Nottingham.
18 Lubanski. 19Francisco Javier Mffiliz. 20 Olivier Clement. 21 VicenteLanza.
22 CaballeroSantoro 23 Manuel Redondo Diaz. 24 Luis Battalia.
25 Carlos FranciscoBellingieri
26 Berruti. 27 Juan Bonacossa. 28 Juan Bonino. 29 Juan Borelli. 30 Lorenzo Juan Cantu. 31 Pablo Andrés Carmagnola.
33 Carlos Demaria. 31 Felipe Demichelis. 35Joaquin Fiorito. 36 Pedro Frota. 37 Pedro Galló. 38Antonio Garbiglielti. 39 LorenzoGirola. 40 Angel Maffoni. 41 Sixto Malinverni. 42 José Mons. 43CayetanoPertusio. 44 Polto. 45 Rignon.
16 Carlos Jacinto Sachero '
47Casimir°Sperino.
48 D.Demarchi. 49 José Dazrel!d Francis. 50 C. G.Simout.
51 G. J. J.Van Melkebeke. P. J. D.Avoine. A. A. Cornelius. 51 MauricioReviglio.
55 Pedro Federico Thomas.
56Alfonso Amussat. 57 Gobhi. 58 ErnestoGénieys. 59 Justino Benoit. 60 A.Guépin. 61 Azémar.
62 Juan Bautista Massone. 63 Juan Garelli. 64 Juan Wildberger. HonoratoAubanel. 66 Sebastian Carbasse. 67 Teodosio Blondin. 68 Massart. 69 CayoPeyrani. '70Clemente Bonnefin. 71 Gabriel Belcastel.
'72 JuanBautista Ullersperger. P. J.Vallez.
74 J.Ch.Ilerpin(de Metz).
'75 AlbertoErlenmeyer.
'76 ErnestoGodard.
Albarenga.