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ACTA
DE LASESIÓN PÚBLICA.
INAUGURAL
QUE LA
REAL ACADEMIA
MDIGIXA
de
t1otce1onu
CELEBRÓ EN 20 DE ENERO DE 1897
Publfease por acuerdo de la Academia
BARCELONA
ESTABLECIMIENTOTIPOGRÁFICO DE FEDERICO SÁNCHEZ Arco delTeatro,16—Teléfono,1.190
Lapublicaciónde las Memorias y demás es critos hecha por acuerdo de la Academia,no supondráque éstaacepteniprohije las opinio
nes quecontuvieren,las cuales seguirán perte
neciendo exclusivamente á losautores deaqué
llos,auncuando las doctrinasde sucontextose conformarenconlasde laCorporación.
Este artículosetranscribiráen laanteportada de toda Memoria que por acuerdo de la Acade miasepublicare.
(Articulo 37delReglamento.)
tVIV.9
Gorti?elIhI 1.1@i4D910Goieleo0 ewiiltele0191919
9,*
eivisuel
'ovalonractribuh-Drarr
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"440~0111141441101001414's
:,4014~1444444444412
ACTA DE LA
SESION
PÚBLICA
INAUGURAL
CELEBRADA EL DIA 30 DE ENERO DE 1897
BAJO LA PRESIDENCIA DEL
Dr. Berírán
ynublo
las nueve y cuarto de la noche em
pezó
laSesión á
la cualasistieron
elExcelentísimo
Sr. Rector de laUni
versidad,
D. ManuelDurán
yBás, quien
ocupó
laderecha
del Sr.Presidente;
elEx-:
cetentisimo
Sr.Inspector
deSanidad Militar
(á
laizquierda);
unrepresentante
del Excelentísimo
é Ilmo. Sr.Obispo
de laDiócesis,
y otrossenores
representantes
de la Excelentísima
Diputación
Provincial,
de la Acade mia -yLaboratorio
de CienciasMédicas,
de laAcademia
Médico-Farmacéutica,
Academia Médi
co-Homeopática,
delColegio
deMédicos
y del deFarmacéuticos,
delAteneoBarcelonés
y otras Corde
número, corresponsales,
profesores
enMedici
na, alumnos de esta
Facultad,
etc.Abierta la Sesión por el Sr.
Presidente,
elSecretario infrascrito
leyó
laresena
delos
trabajo's
en que seocupó
laCorporación
durante
elario
1896.Terminada
ésta,
el Sr.Presidente manifestó
que una muylamentable
indisposición
del Dr. Piy Surier
encargado
deldiscurso
deturno, obliga
baá
la Academiaá
verseprivada
de escuchar lapalabra
de tan doctocomprofesor,
el cualhabía
designado
parasustituirle
en el actoinaugural
alacadémico
D.Ramón Turró.
Acto
contínuo,
el Sr.Turró
leyó
dicho discur
so del Dr. Pi y
Surier,
titulado:
Elproblema
actual de la
Patologia, suprimiendo
algunos
capítu
los por ser la obra
muy
extensa.Abriéronse
después
lospliegos
lemados
paraproclamar
el nombre
delos autores
premiados
enel concurso del
ario,
resultando
serlos
siguientes:
1.0 D.
Dionisio García
Alonso,
médico
de Villavieja
(Salamanca),
PREMI0(medalla
deoro y
títu
lo de
sócio
correspondiente),
por suDescripción
de una
epidemia
de
Sarampión
yCoqueluche
ocurrida en
Villavieja.
2.°
Dr. D.José María
.Caballero
y Villar. AcCÉSIT,
por su Memoriadescriptiva
de unaepidemia
de
Viruela
enSto.
Domingo
de la Calzada(1871-72).
3•0 D
Francisco Carbonell
ySolés,
médico
de estaciudad,
ACCÉSIT;
por suHistoria
de la Legislación
Sanitaria
espanola, presentada optando
al PREMIO RODRÍGUEZ MÉNDEZ.
El Sr.
Carbonell, jóven
y
distinguido
médico
deBarcelona,
hallándose
en elsalón,
é invitado
por
laPresidencia,
sepresentó
á recibir
el diploma.
Quemáronse enseguida
lospliegos
que
contenían
losnombres
de los autores nopremiados,
yel
Secretario
leyó
elPrograma
del Concurso dePremios
de laAcademia para
elario
1897.Finalmente
el Dr.Bertrán dió
lasgracias
á
todos
los senoresrepresentantes, delegados,
pro fesores ydemás
concurrentes,
por
suasistencia al
acto y
declaró
inauguradas
las tareascorporativas
delpresente
ano,
levantando
laSesión.
Barcelona 30 de Enero de 1897.
V.° B.°
ELPRESIDENTE, ELSECRETARIO PERPETUO.
RELACIÓN
DE LOSTRABAJOS
ENQUESEOCUPOLA
Rea1jicadernia
de
Tedicina
jPrugía
DE BARCELONA
durante el afto de 1896
LEIDAEN LA
SESIÓN PÚBLICA INAUGURAL DEL DÍA 30 DE ENERO DE 1897
porel
ACADÉMICOSECRETARIO PERPÉTUO
»OH
•1.11.3.1911111é
'11
pmo.
SENORES:
L resenar
hoy
las tareas académicascorrespondien
tes al finido
ano,
debohablaros,
antetodo,
de loscambios ocurridos en el
personal
de laCorporación.
Tres han sido las vacantes declaradas á consecuencia de haber dimitido los Doctores
Casarla, Góngora
yArola,
dimisionesobligadas
por haberse ausentado di chos académicosnumerarios,
fijando
su residencia endistantes
provincias,
ypasando,
porconsiguiente,
según
prescribe
el artículo 11 de losvigentes Estatutos,
ála categoría
decorresponsales.
El Dr. Casarla ascendió á la cátedra de Historia crí
tica de la Farmacia
correspondiente
alperiodo
del Doctorado, El Dr. Arola
fijó
suresidencia enSantiago,
por haberocupado
una cátedra en la Facultad de Farmacia deaquella
capital,
y el Dr.Góngora
porexigencias
de salud y circunstancias
particulares dejó
suescogida
clientela barcelonesa y la balnearia de la Puda de Montserrat para trasla
darse á
Marmolejo.
Bien que el motivo de habernos abando nado tanqueridos
companeros,
no sea la ausenciaeterna,
•
-( 12 )—
esta Academia lamenta de veras el verse
privada
del buen concurso deellos en sus tareas y de la sincera estimación con que nos honraronsiempre,
la cualpermanecerá
mutuay
completa,
comoahora,
enadelante.
Con la
rapidez
prescrita
pornuestrosEstatutos,
quedó
bien
pronto compensado
el vacíoquetan valiososcomprofe
sores
dejaron
en estaCorporación.
Sustituirá al Dr. Casanael ilustre catedrático de Farmacia D. J. Casares y
Gil,
farmacéutico de mérito sobresaliente y en ciencias
químicas
peritísitno,
al Dr.Góngora,
D. JoséRoquer
yCasadesús,
conocido médico deesta
ciudad, publicista,
escritorcorrecto,
y
laringólogo
dereputación
europea; yocupará
el sitio del Dr. Arola eljoven
médico D. Valentín Carulla yMargenat,
profesor
auxiliar deFarmacología
de la Facultad de Medi cina poroposición
y licenciado enFarmacia,
á cuya ciencia y arte dedicó sus
mocedades,
cultivándola aúnhoy
díacon carino y
profundo
conocimiento en cuantos estudios larelacionan con la clásica
Terapéutica
que considera el fármaco como
agente
sobre elorganismo.
Sean bienvenidos á nuestro seno tan estimables com
paneros,
paracompartir
connosotros las tareascorporativas.
Respecto
á los académicoscorrespondientes,
hemossufrido lamentables
pérdidas.
Falleció elmédico D. FaustinoRoél,
personalidad
verdaderamente ilustre en la Medicinacontemporánea. Algunos
médicos modernos apenas habrán oido nombrar al célebre médicoasturiano,
y por esto mecomplazco
en recordaraquí
susméritos,
para quejustipre
ciándolos vosotros como á vuestro criterio
toca,
convengais
en que supo honrar á supais
y á laclase,
comoprofesor
docto,
infatigable
y virtuoso. Faustino Roél fué médico 1.0 poroposición
y Decano delHospital
y delHospicio
deOviedo;
médico de establecimientospenitenciarios;
secreta-,rio de la Junta
superior
de Sanidadprovincial
del litoral de-( 13 )
médico de banos y aguas minero
medicinales;
vocal delaJunta
superior
consultiva de la Audiencia deOviedo;
de laJunta
provincial
deBeneficencia;
y ostentónoblemente
ensu
pecho
la Cruz deEpidemias
y la deIsabel
la Católicapor sus
extraordinarios
servicios durante laepidemia
colérica que invadió los
pueblos
deRivadesella
y Pola de Siero. Entre otras muchasmonografías
quepublicó,
es demérito sobresalienteéindiscutible el
magnífico
infoleotitulado:
«Etiología
de laPellagra,
ó sea de lapluralidad
delas
enfermedades
queafligen
allinage
humano». Estudio basado enpruebas
históricas,
documentos fehacientes y hechos
clínicos,
al queacompana
un mapageológico
demos-,trativo de la distribucion
geográfica
de 30leproserías
en laprovincia
de Asturias. Tomo de 672páginas,
con 23 láminas
cromo—litográficas,
que bien mereceríaser masconocido
y
mejor
consultado
por nuestrosdermatologos
éhigienistas
porque,despues
de los estudios deThierry
(1755)
Strambio
(1794)
Fontana(1825)
Martín Duclaux(1846)
y Lombroso
(en
1869)
yalgunos otros,
no sehabía dado á la estampa nada tan
completo,
tanprofundizado
en lonosológico,
ni tan
galanamente
escrito,
como el libro de Roél. La clasemédica de su
país
natalrecompensó
justamente
á Roél por suobramaestra,
y en Noviembre de1881
nuestraCorpo
ración manifestó su
aplauso
al autornombrándole
Académico
Corresponsal,
y ya que no cabe en esta resena unabiografía completa
del ilustreprofesor
asturiano,
valgan
estos méritos que acabo de
consignar
para que sedestaque
sobre otras de reconocida
importancia,
lafigura
del distinguido colega
cuya muertedeploramos.
Otro miembro
Corresponsal
digno
de toda estima yrespeto
haperdido
estaAcademia
en la persona de D. JuanMarsillach.
yParera,
médicó numerario delHospital
de la Santa Cruz porespacio
de muchosarios;
fatigado
por una-( 14
)-alma,
que por los embates deltiempo;
enfermo y sin fuerzas el cuerpo, pero
enérgico
de voluntad el
espíritu
paradisimular
suquebranto, bajó
alsepulcro,
resignado
ya con
el hado fatal quehabía muerto sus ilusiones
arrebatándole
unhijo
ilustre
en el inundo de lasartes,
áquien
amó conidolatría.
Si
pudiera desembarazadamente
contaros
quien
eraMarsillach en su. numerosa clínica
quirúrgica,
yo que me
honré siendo
practicante
suyo en1870,
como meholgara
endescribir
aquella
serenatranquilidad
con que veía ydiagnosticaba,
aquel
suavetrato,
humano, carinoso,
que
tenía para con los
pobres pobladores
de la gran sala de Ci
rugías,
y hasta con losdesdichados
de laSala-Cruz
que la diosa Venus había: cruelmente
fustigado,
y con losinfelices
que él
sabiamente
habíaoperado
dealgún
malquirúrgico.
Porqué,
Marsillachtuvo suépoca,
ylarga
yaprovechada,
en
que toda la ciudad le tenía como gran
cirujano, inteligen
tesifiliografo
yafortunado
operador.
Ni los anos transcurridos en la monótona tarea
hospitalaria,
ni lalibertad
de acción que dá una clínica sinalumnos
ni censores, le in
clinaron
jamás
á la rutina. Estudiósiempre;
gozábase
en
leer los Tratados mas modernos de su
especialidad;
no era
sistemático
en losprocedimientos operatorios; gustaba
escribir en
periódicos
de Medicina y aúnllegó
á
publicar
unAnuario ó revista
dedicada
á condensar en un tomo todo loseketo
que en el arte decurar se había escritodurante
elano.
(1)
Publicó
también en1871
unlibrotitulado
«Vade-mecum del
Practicante».
Alboreaba entoncesla teoría liste
nana ô de la
antisepsia,
en.Espana;
doctrina
que en pocotiempo
diseminósuesplendor
por todo elmundo;
deaquí
resultó que el libro
quedase muy pronto
algo
atrasado,
en su
doctrina y hasta en sus
procedimientos tópicos;
perojamás,
-( 15
)-por
ello,
dejará
de ser de actualidad por suspréceptos
ypor sus
consejos
á lajuventud,
médica,
y por laprofusión
de conocimientos
personales,
todos ellos utilísimos y expuestos
en estilofranco, llano, peculiar
suyo.El .Dr.
Marsillach
fué nombrado miembro correspon sal de estaAcademia,
en virtud y en recompensa de unaMemoria que
presentó,
referente á un caso de íleo muygrave. En el
propio
ano y en el concurso ordinario de premios,
obtuvo la medalla de oro que concede estaCorpora
ción,
por untrabajo
titulado:«Observaciones
sobre el tratamiento de la tisis
pulmonar
por medio de loshipofosfi
tos» y tal sería el mérito de este
trabajo,
que la Academia acordóimprimirlo
ásus expensas.Suyos
también son: unconocido
folleto deaquella
época
que lleva porepígrafe:
?Que
medios deberá aconsejar
elmédico—higienista
alGobierno,
para atenuar los fu nestos efectos ocasionados por laprostitución?»
y una colección de cuadros
gráficos
de Anatomía humana.EstaAcademia debe
agradecer
áMarsillach
un granservicio. El fué
quien publicó
laprimera
y la mas extensaResena histórica de la Academia de Medicina y
Cirugía
deBarcelona desdesu fundación.
Trabajo
hubo de costarle reunirtanto material diseminado y tanto manuscrito mal guar
dado ennuestroarchivoyen otros desde el finido
siglo,
peroMarsillach
logró
suobjeto,
dando á luzaquella
Resena enelCompilador
Médico,
entoncesórgano
oficial deesta Acade mia(ano
1865),
y adornándolacon notables comentarios.Cuando Marsillach recibió en mitad del corazón el te
rrible
golpe
de ver morir á suhijo
en elpleno
de lajuven
tud. y de la
gloria,
se declaróvencido,
vaciló su fé en elporvenir, decayeron
sus ánimosquirúrgicos,
enfrioseaquel
entusiasmo caluroso para
proseguir
la vía por la quedesde
tantos anos andaba sonriente y dichoso. Perdida la
confian
-( 16
)-monasterio deYustepara retirarse del mundo
(como aquel
gran Carlos de honorable
memoria)
encontrándolo en unapintoresca
villa cercana á lacapital,
y tanta decisiónmostró en este fatal
retraimiento,
que hasta sedespojó
desu
biblioteca,
de la cual hizo donativo á estaAcademia,
en1889,
con las condiciones de que estaescogiese
las obrasque no
figurasen
en su colección y destinase las restantesal estudiante de medicina mas
aplicado
y de menos recursos, encargo que
cumplió
la Academiaprevio
informe del Excmo. Sr. Decano de la Facultad.Asimismo,
obligado
áseguir
esta crónicamortuoria,
debo recordaros el fallecimiento del Dr. TheodosioBlondin,
médico de Pau y consultor en el Balneario deArgelés
deBigorre; discípulo
de la Escuela deMontpellier
y fanático por el ideal que ellarepresenta.
Fué nombrado correspon salextranjero
de estaCorporación
en virtud deunapubli
cación encuatro tomosque remitió en 1860 titulada: «Obras
médico-filosóficas y
prácticas
deStahl»,
las cualestradujo
y comentó con erudición clásica.
Publicó varios
opúsculos
referentes á lasAguas
deArgelles-Gazost,
y un estudioterapéutico
delaAsboliva,
producto extraído del hollín.
El Dr.
Blondin,
había sido laureado por la Facultadde Medicina de
Montpellier,
Miembro de la Sociedad de Medicina deParis; premiado
con medalla de oroporla Academia de Ciencias de
Nápoles,
miembro de la Academia de Historia Natural deHalle,
de la EscuelaOrfila, etc.,
etc.Descansen en paz.
Académicos
correspondientes
nombrados en el finidoano de 1896:
D.
Hermenegildo
CarrerayMiró, premiado
con accésit en el concúrso de1896,
por suTopografía
médica de Santa-( 17
)-D. Bonfilio
Garriga
yPuig,
autor de la Memoria pre sentada al concurso deepidemiología
(Premio
Salvá) 1896,
que trata de una
epidemia
deviruela ocurrida en Monistroldesde Febrero á Julio de 1895.
D. E.
desVigo,
médico,
residente enMataró;
autor deuna Memoria manuscrita que
presentó,
titulada: «Gimnasiade
Salón;
médica éhigiénica».
D. José Tarruella y
Albareda,
deBarcelona, quien
probó
sus conocimientos facultativos y su mérito en unavoluminosa
monografía
que trata de la UrobilinuriaD. Juan Bassols y
Villar,
quepresentó
en extensos capítulos
el fruto de sus observaciones clínicas y socialesacerca la enfermedad que modernamente se denomina:
Neurastenia:
Relacionada esta
Corporación
con todas lasAcademias,
Institutos,
Ateneos y Sociedades científicas deEspana,
ha recibido de todas ellaspruebas
fehacientes de cordial afecto en distintas
ocasiones,
así como de distinción ya que lahan honrado invitándola á sesiones y haciéndole donativo de diversas obras.
El Excmo. Sr. Gobernador de la
Provincia,
Presidente de la Junta de la Construcción de la nueva Carcel de Barcelona,
sedignó
comunicará esta Academia que debiendoprocederse
por el Gobierno de S. M. al nombramiento deun médico como
representante
de estaCorporación
para cubrir la vacante que en
aquella
Junta resultó por fallecimiento del vocal D. Francisco
Boyera,
y elevarse al Minis terio de Gracia y Justicia lacorrespondiente
propuesta
enterna
según
loprevenido
en el art. 2.° del Real Decreto de-( 18
)--demia
designase
tres miembros numerarios. Fueron propuestos
los Dres.Aumatell,
Mascaró y Viura.En virtud de otra comunicación del
.Excmo.
Sr. Gobernador de la
Provincia, procedió
la Academia á emitirinforme sobre las condiciones
higiénicas
de un muladar(llamado Sils)
que radica en el término deSans,
propiedad
de D. M.
Ragull,
al que se había incoadoexpediente
desde
1891,
encaminado áprobar
que erapeligroso
para lasalud de los vecinos. La Sección de
Higiene compuesta
porlos Dres.
Rodríguez Méndez, Giné, Roquer, Bofill,
Aumatell,
Bonet yDurán,
sepersonó
en dichoestablecimiento,
para obrar con
completo
conocimiento de causa, y vistaslas
circunstancias
delmismo,
hubo de informar que: Auto-rizada
legalmente
la industria delaprovechamiento
de losdespojos
deresesmuertas,
no se encuentra en el Muladarde Pral de Sils
transgresión higiénica
alguna
que lehaga
merecedor de medidasespeciales,
ni menos desupresión.
Que
lapráctica
deaprovechar
ellíquido
resultante de la cocción de losdespojos
nopuede
reputarse
peligrosa
parala salud
pública,
sobre todo teniéndose en cuenta que laprolongada
ebullición á que se les somete es suficientepara destruir
cualquier
gérmen patógeno
quepudiere
contener.
El Excmo.
Ayuntamiento
de Barcelona en atento oficio remitido en
Enero,
comunicó que laCorporación
Municipal
había tornado la iniciativa de formular unas basespara el saneamiento deesta
capital,
á fin de estudiar lo másconveniente dadas las condiciones actuales del subsuelo de
la misma. La Comisión
encargada
de tan vital asunto secomponía
detresconcejales
por cada una de las Comisio nes deGobernación,
Fomento yEnsanche,
y tres individuos de esta
Academia,
á la cualpidió
se sirvieradesignar
•
-(
19)-acuerdo. Nombráronse para este cargo los Dres.
Rodríguez
Méndez,
Cardenal yComenge.
Por acuerdo tomado en la sesióni del 1.0 de Junio se
pasó
al Excmo. Sr. Alcalde Constitucional una comunicación motivada por el incremento que en los meses de Abril
y
Mayo
habían tomado en estaciudad las afeccioneserupti
vas de lainfancia,
en cuya comunicación se recordaba alMunicipio
la necesidad de hacercumplir
con todorigor
lospreceptos
higiénicos, siquiera
los más fáciles ysencillos,
como son: evitar el contacto de los cuerpos
infectados,
pues con frecuencia muchos ninos convalecientes vuelven á loseolegios,
estando aún enperíodo
de descamaciónlenta,
y seaconsejaba
que se diesen órdenes á losDirectores
deio
dos los
Colegios
asípúblicos
comoprivados,
para que soloadmitan ninos convalecientes de escarlatina cuando pre
senten certificado facultativo en el cual conste que el
enfermo lleva ya 40 días de
convalecencia,
y que sehanverificado en su
domicilio,
en sus vestidos y en sustegu
mentos,
todas lasprácticas
de desinfección que la Cienciaaconseja.
A este
oficio,
contestó á últimos de Junio el Excelentísimo Sr. Alcalde
agradeciendo
el interés que se tomaba laAcademia por la salud
pública,
y haciendopresente
que habíapasado
una circular á todos los Directores de Escuelas ordenándoles el
cumplimiento
de lospreceptos
higiéni
cos indicados.
En sus relaciones con los
Tribunales
deJusticia,
laAcademia ha intervenido en los
siguientes
asuntos:1.0
Informe sobrelitigio
de honorarios entre un médico de Valencia que llamado áBarcelona por un cliente
suyo, hubo de permanecer
aquí
diezdías,
abandonando susenfermos en
obsequio
al cliente. La cantidad reclamada por-( 20
)-tivas,
inyecciones
desueroChéron, etc.,
era de 10.000 pesetas,
que deninguna
maneraquiso
pagar elcliente,
entablándose demanda
judicial. Preguntaba
elJuzgado
á laAcademia si los
fijados
honorarios eranjustos
ydebidos,
yla
Academia,
consultando los autosproporcionados
por elJuzgado (por
cierto muyvoluminosos)
y estudiando las circunstancias controvertibles y las de razón
común,
precedentes,
condiciones delmédico, etc.,
dictaminó: que los honorarios eranjustos
ydebidos,
con tal que el médico hubiese obrado á instancia y con asentimiento del
cliente,
en sus servicios facultativos.2.°
Informe sobre el estado mental de D. M. C.A.,
quien después
de 2 anos de reclusión en un Manicomio áconsecuencia de manía
impulsiva, parecía
curado. Así loconfirmó la
Academia,
bien queaconsejando
ála Autoridadvigilancia
sobre elsujeto,
á fin deapreciar
cualquier
anomalía en sus actos que indicara tendencia ála
reproducción
de lavesania.
3.° Otro
informe,
concerniente al estado deD. J. S. S.recluso en el Manicomio de S.
Baudilio,
en virtud de exhorto de la Sección 2.« de esta Audiencia
provincial,
preguntando
si elpaciente
esta curado de su vesania y si podía concedérsele libertad sin
peligro
para su familia. Vistoel enfermo y consultada su historia y los certificados expe
didos por el Sr. Director del citado Manicomio y otros fa
cultativos,
se comunicóque dichosujeto
había sufrido delirio sistematizado
progresivo;
que merced al tratamientoempleado
en elManicomio,
su curaciónparecía persistente
desde Octubre del
1894,
pero como a pesar de su estadoaparentemente normal, hay
que tener en cuentala naturaleza y ordinaria evolución de
aquella
frenopatía,
la Acade miacreyó
prudente
que el individuo continuase recluidoporque el
régimen
del Establecimiento ha de serle prove—( 21 )—
contingencias,
ya que elpaciente
cometió un homicidio enlos
primeros
raptos
desulocura.Asuntos científicos que se trataron.
El Dr.
Viura,
en la sesión del 16 deMarzo,
consideródigno
de mención el gran número depirexias
conerupción
anómala
indefinida, (verdadero rash)
en losninos,
observada en la
quincena.
Acompanaba
á la dermitis laangina,
nodiftérica,
de exudado mucosoblanquecino.
Enalgun
ninode pocos meses la
hipersecreción
fué tan abundante en lafaringe
nasal y fosasnasales,
que ellíquido
exudado pro ducíaangustia respiratoria
con asfixia.Ocupándose
de losefectos del suero
Roux,
citó el caso deun nino al cualenplena
grippe
se le desarrolló difteriafaríngea.
Las seudomembranas fueron abundantes en la
faringe
nasal con cori zafétidoputrilaginoso.
El uso del suero durante tres díasmodificó las
placas,
que sedesprendieron;
pero la fiebre yla albuminuria aumentaron. La anorexia era
absoluta,
locual para el Dr. Viuraes un
signo
malísimo en estasenfermedades;
enefecto,
en este casoclínico,
libre el enfermo depseudo—membranas,
quedó anúrico,
sin tardarpresentaron
se síntomas comatosos de uremia y muerte.
Preguntase
el Dr.Viura,
?esa albuminuria grave eraefecto de la difteria ó del suero
empleado?
Cree,
en vista deque había albúmina antes de
inyectar
el suero, que éste noinfluyó
en contra sobre lanefritis;
más aún:opina
quecuando se
aplica
el suero, la albuminuriadisminuye,
auncuando se
haya inyectado
en grancantidad.
El Dr Viurase
pronunció
lealmente a favor del suerono ló
acepten,
en 'virtud de unescepticismo
injustificadcr,
puesto
que no habiéndoloempleado
nunca, suoposición
carecede base firme.
Dijo
quemejor
sería que los médicos en vez de oponerse á un progresoterapéutico,
lo estudiasenprácticamente
en susenfermos,
locomprobasen
yadquirie
sen un criterio
fijo;
que estos inventos solo lospuede
sancionar la observación atentísima y
desapasionada.
El Dr. Martinez
Vargas
corroboró las ideas del doctorViura, respecto
á la utilidad del sueroantidíftérico
aún enlos casos
complicados
connefritis,
ydeploró
que losgrandes
clínicos aun vacilen ó manifiesten aversión al suero
Roux,
que es unaverdadera
conquista
terapéutica.
No cree que laaparición
de la urticaria seacontraindicación, puesto
que es común esta dermatosis hasta en lasinyecciones
desueronormal y artificial.
El Dr.
Fargas
entró enconsideraciones, despues
de lascuales
opinó
que á vecesel sueropuede
agravar la albuminuria, puesto
que el suero debe eliminarse por losrinones,
y como es una solución de
toxinas, éstas
actuan sobre elepitelio
renal yloalteran, provocando
Ó aumentando la albuminuria.
Hay
que recordarsiempre, dijo,
que todos los sueros, hasta elfisiológico,
llevantoxinas,
por lo que, sienun diftérico está ya alterado el
rinón,
estas toxinas aumentarán la descamación
epitelial nefrítica,
y deaquí
quelocrea contraindicado en la difteria cuando el
paciente
ofrecealbuminuria.
El Dr. Durán afirmó que el suero
puede
provocar albuminuria,
y que lapuede
aumentar sien el acto de usarloexiste ya nefritis
albuminúrica.
La base de criterio paraestos casos es que el suero no es
antitóxico;
no es más queun
agente
de acción local sobre laspseudo-membranas,
provocando
surápido desprendimiento;
sobre la infeccióngeneralizada
no obra poco ni mucho. Su eficacia sobre el-( 23
)-de
aquí
lanecesidad
de usarlo desde elprincipio,
y deaquí
sus brillantes efectos en el crup,
puesto
que éste mata porobstrucción física y el. suero libra
prontamente
al enfermode esta
obstrucción.
Anadió quehay peligro
en usar dosismayores de 10 gramos, por el
colapso
cardíaco.El Dr. Turró dice haber
demostrado
ya en otras Corporaciones
médicas que el suerono es antitóxico. Nadie loha
podido probar
experimentalmente;
alcontrario,
teóricamente debe agravarla
intoxicación,
pues en lasinyeccio
nes hechas en
caballos,
hasta les haproducido
nefritis.En
consecuencia
quedó
entre el Dr. Turró y el doctorViura cierta unidad de
criterio,
conforme con el del doctorDurán,
es decir: que el suero únicamente obra sobre el estado local ó sobre el
exudado,
siendoindispensable aplicar
looportunamente
alprincipio,
en cuantoaparecen
lospri
meros exudados sobre las mucosas que de
preferencia
se ven atacadas por estaenfermedad.
Todo cuanto sehaga
más tarde es
problemático,
puesto
que las toxinas han invadido ya el
organismo
todo.Interesantísima
fué larelación
que el Dr. Bonet dióen la Sesión del 15 de Abril acerca los efectos del suero
anti-estreptocócico,
llamado deMarmorek,
en las infecciones
puerperales.
Dijo
el Dr. Bonet que tiene comocriterio
en la
aceptación
de suerosterapéuticos, ensayarlos
contodareservay
pulcritud,
puesno se le oculta que sonlíquidos
de índole
variable,
faltos dehomogeneidad,
lo cualpuede
amenguarsupoder
antitóxico,
ó,
alcontrario,
en ciertoscasos
producir
efectos demasiado activos yperniciosos.
Se funda en ladoctrina,
que créeverdadera,
de laidentidad
entre el microbio de la infecciónpuerperal
y el de laerisipela,
demostrada
por muchosbacteriólogos,
y eneste sentido
aceptó
el ensayo del sueroanti—estroptocócico
--( 24
tocológica
oficial de la Facultad de Medicina. Tiene ya registrados
cinco casos de infecciónpuerperal
curadoscon el uso de este suero.
En el
primer
caso:Mujer
de 22anos,
casada. 2.° parto con
presentación
de cara. Duración 14 horas.Alumbra
miento 30 minutos. Infección por
loquios
al 2.°día,
empezando
porescalofríos,
fiebre. etc. El suero seaplicó
hipodérmicamente,
en 3inyecciones
de 15 centímetros cúbicos cada una. Resultado
favorable,
pues enlugar
de evolucionar la infección durante muchos días
quedó
curada en6
días.
El
segundo
caso, con síntomasanálogos,
evolucionó
en cuatro
días,
curandocompletamente
con seisinyec
ciones.
Tercer caso.—Infección al 4.° día. Curación
rápida
concuatro
inyecciones.
En el cuarto caso, la fiebre no cedió á la
quinta
inyec
ción. Necesitó 19inyecciones,
las que sesuspendieron
aldecimoséptimo
dia,
porque latemperatura
nobajaba
de sus390,
y sepresentó
un exantemaescarlatinoso,
cuyaapari
ción hizo creer en el acúmulo de toxinas en el
organismo.
Pasados cinco días sin usar el suero,
apareció
colapso,
quefué combatido con la
cafeína, etc., etc.,
pero al fin la enferma curó.
El
quinto
caso, aúnpendiente
detratamiento,
es unamujer
en vías decuración, mejorada
desde latercerainyec
c:ón desuero.
Después
dealguna
consideracióngeneral respecto
áestos casos, sentó el Dr. Bonet las
siguientes
conclusiones:
1: El uso del suero de Marmorek es
inofensivo
parael
organismo,
aplicado
debidamente.
2. Los casos referidos
inducen
á creer que resultaabreviado el ciclo evolutivo de la
infección.
-(
25)-el ánimo á creer en la eficacia deeste tratamiento y á per
severar en él con mayores esperanzas.
Pidió la
palabra
el Secretario infrascrito para felicitar al Dr. Bonet por sucelo en favor de todo progreso tera
péutico, permitiéndose
tan sólo hacerlealgunos
reparos enel sentido de que no todas las infecciones llamadas
fiebre
puerperal
soniguales,
pues elagente
infectante no essiempre
elmismo,
y se ventipos
leves ytipos
graves, locual
quita
no poco valor á los resultadosobtenidos,
puespodrían
haber sido estas cinco observacionescasos de infecciones
simples,
de pocovuelo,
que tambien hubiesen curado sinapelar
al suero de Marmorek.A lo cualcontestó el Dr.
Bonet,
que la fiebre puerperal
siempre
es grave y de evoluciónindeterminada,
por loque; la
rápida
defervescencia
obtenida con el suero, no lahubiera
conseguido ningún
otroplan terapéutico.
El Dr.
Fargas
agradece
al Dr. Bonet suiniciativaenla
aplicación
del sueroMarmorek,
anadiendo que es elpri
mero que lo ha usado en Barcelona dando una
prueba
másde su fervor científico en la rama
patológica
que cultiva.Los casos referidosno deben ni
pueden
discutirse,
pero me recen observación. Parajuzgar
engeneral
con buen criterio es
preciso aquilatar
bien los hechosobservados,
fijando
ante todo el
diagnóstico,
porque los casos concretosque lle van laetiqueta
de infecciónpuerperal
no son idénticos. Ajuzgar
por las variedades de dichainfección,
pondríase
enduda que un mismo
estreptococo
produjese
cuadros sintomáticos tan
diversos,
y diríase quehay
distintos microbiosproductores.
Es enorme la diferencia entre las fiebres puerperales engendradas
por losloquios
descompuestos
y los queson efecto de
ingreso
delestreptococo
por otras vías. En elprimer
casopodía
haberse tratado de una fiebreinfecciosa
por absorción de
putrílago;
en elsegundo
(septicemia
-( 26
)-.que los
loquios
enésta,
nisiquiera
sonfétidos,
yprecisa
mente esta circunstancia
(loquios inodoros)
es depésimo
pronóstico
en las infeccionespuerperales.
De esto el DoctorFargas dedujo
que si los cuatro de los casos relatados porel Dr. Bonet son de reabsorción
loquial,
no tienenningún
valor
respecto
al suero. Uno de ellos(el 4.°)
cuyo síndrome es de verdadera infecciónpuerperal
septicémica,
esel únicoque
puede
acreditar la eficacia del suero; porque en estassepticemias
en que los 400 son por infeccióngeneral
sinsíntomas
localizados,
toda medicación resulta estéril.Que
se
presenten
más casos como éste,curados,
y entonces podremos creer en la eficacia del suero de Marmorek.
Convino el Dr. Bonet en que estas
objeciones
teníanbastante
fuerza,
por lo cuallas aceptaba
yagradecia;
perose afirmó en que la infección era
general
porque la Sala deObstetricia del
Hospital
estácontígua
al grandepartamen
to deCirugía,
separado
de ella por untabique incompleto
en suparte superior;
la enorme cantidad de microbiospió
genos que
pululan
enaquel
comúnambiente,
se hace notar en dicha enfermeríatocológica,
por modo que en ella cualquier
heridavulvar, grieta
depezón, etc.,
secubre ámenudo de
placas
deestreptococus.
Hubo en los casos referidosalteración
loquial
yescalofrío,
si bien la fetidezloquial
cesócon los lavados
antisépticos.
En último
resultado,
anadióque para dar másseguri
dad al
diagnóstico
seríapreciso
verificar el exámen bacteriológico
de la sangre, y que en adelanteadoptará
este medio
semeiótico,
paradepurar
la eficacia del nuevo suero.El Dr.
Roig
crée que la llamadasepticencia puerperal
(generalizada)
es una formararísima,
por lotanto,
que elsuero de Marmorek no sea tan eficaz en las formas locali
zadas,
las más comunes, como en lasgeneralizadas.
Recordó unahistoria clínicaen la que el escalofrío inicial de la
•
--( 27 )
región
uterina ni en los anexos; solo sehabían
presentado
grietas
en los pezones,linfangitis
mamariaéinfartos axila-res. Un
tópico
de tímolrebajó
prontamente
la fiebre. Pocosdías
después
sobrevino otro fuerteescalofrío,
fiebre y nuevaerisipela,
en elcuello,
que remitió conaplicaciones
de tímol;
pero á las 48 horaspresentóse
erisipela
abdominal,
acompanada
de gran escalofrío ytemperatura
á410.
Por la novísima identidad quehoy
se admite entre laerisipela
yla
fiebre
puerperal,
lepareció
indicadísimo el
suero en estaenferma;
pero no se atrevió á ser elprimero
enaplicarlo,
felicitándose
de ello pues álasiguiente
visita, después
detanta
alarma,
encontró á lapaciente
enconvalescencia.
Pero,
pasada
una semana decalma,
en estado deaparente
salud,
repitió
el escalofríocomo manifestación de una cardais
séptica
que acabó con la vida de lapuérpera. ?Era
prudente
emplear
el suero en esta enferma? El Dr.Roig
confiesa
ingenuamente
que por varias razonesextra-cientí
ficas que
huelga
mencionar,
no seatrevió,
por más que enadelante no vacilará en
emplearlo.
Pidió la
palabra
el Dr, Bonetexpresando
que se complacía
en haber oído el relato del Dr.Roig,
pues en dicho caso se vépalpable
que el microbio de laerisipela
esel queorigina
la fiebrepuerperal;
que desde muchotiempo
le ha bíallamado
la atención estacoincidencia,
estas relacionesentre los afectos
puerperales
y las dermitiserisipelatosas.
Hechos tan elocuentes animan á perseveraren tales estu
dios y á resolverse firmemente á usar esta nueva medi
cación.
El Dr.
Fargas
opinó
que los casosanálogos
al referidopor
el Dr.Roig,
pueden
aceptarse
como verdaderaspiohe
mias;
porconsiguiente
el sueroanti-estreptocócico
no hubiese dado resultado curativo.
Se ratificó en que lainfección
puerperal
está en todoescalofríos
repetidos
y rasapariciones cutáneas,
dijo,
solo indicanpiohemia.
Alo cualcontestó el Dr.
Roig:
que no existe uniformidad científica que defina las formas de
septicemia;
tanto esasí,
que cabe admitir conRibemont-Dessaignes
unasepti
cencia
puohémica
al lado de las formasfulgurantes
yperi
toníticas.En la
propia
sesión el Dr.Comenge
presentó
una comunicación resultante de sus
investigaciones
ybusquedas
en el Archivo
Municipal
deManresa,
de la cual parece deducirse que el hechoaceptado
por todos loshistoriadores
de Cataluna
respecto
al envenenamiento de D.Jaime,
Con de deUrgell,
por D. Pedro IV el delpungalet,
no es cierto. Le consta por documentos bien
compulsados,
que el deUrgell
no murió alllegar
áBarcelona,
ni de una manerabrusca y
sospechosa
deenvenenamiento,
sinó que yaveníaenfermo desde Manresa en donde estuvo tan grave que ce
lebró consulta médica á la que asistieron los médicos Mestre
Guerau,
deGerona; Martí,
deVich;
Pau de Tárre• ga; y eljudio
Creques,
médico delRey
deAragón.
Crée,
por los síntomas que sedescriben,
su fallecimiento debido á lo que se llamaba
fiebre
ccilida cuartana(1).
Presentócopiadas
porcalco,
delReceptari
de Manresa,
recopilado
por el boticario en BernatPujol,
recetas(*pie
se leordenaron,
las cualestradujo
del latín y descifró porcompleto
á pesar de lasdificultades
que ofrecen los pergaminos del
siglo
XIV,
llenos de abreviaturas latinas y términos raros de
ingredientes
que constituíanaquellos poli
fármacos apenas conocidos
hoy
día. Comomuestra,
y parano dilatar más el contenido de esta
resena,
solo recordaré la fórmula3•,
quetradujo
así:Recipe:
Yerbas menores(herbetes, acelgas)
violetas,
ana unmanípulo;
polidios
ex (1) En elperíodo caquécticoó de infartos y opilaciones condecaimiento de losespíritusycrecimiento de humores melancólicos....(Comenge)
•
-( 29
)-quisitos,
dos onzas;agárico
selecto,
media onza;salvado,
un
pugill;
flores devioleta, borraja,
rosasrojas,
una onza;anís,
media onza; ciruelasXX,—Hágase
decocción y enella disuélvase
canafístula
mondada,
una onza;de
yerapi
gra de
Galeno,
3dracmas;
aceite devioletas,
dos onzas.Hágase
un clisterpara
el dit noble senorinfant.»
Digno
deaplauso
es el carino que muestra el Dr. Comenge desde hace muchos anos á esta clase de estudios
históricos,
para los cuales serequieren
talento y erudición y
paciencia
tanvastos,
que ápocosprofesores
es dable poseer en estos
tiempos.
El Dr. Durán
leyó,
en la Sesión del 3 deNoviembre,
una nota
comunicada
por el médico de Martinet(Andorra)
D. 11.
Maresch
, acerca una raraepidemia
ocurrida en unpueblecillo
deaquella
comarca llamado Aransa. Comarca
pintoresca
rodeada deprados fresquísimos,
con exuberante
vegetación
arbórea,
ygrandes
cascadas de agua pura,es la deAransa. Hállase en el
Pirineo,
á1.500 metrossobreel mar y tiene 300
habitantes,
no muy devotos de la limpieza,
pero sanos.Transcurrió
laprimera quincena
deMayo
1896 con untiempo
magnífico,
y sin modificaciónapreciable
llegó
Junio,
cuando
deimproviso
se desarrolló laepidemia
con una intensidad tal queen cuatro díassepresentaron
másdecien casos. Familia hubo en la cual todos sus individuos
fueron
atacados;
en otras uno, dos ótres,
en fin no habíacasa
alguna
indemne. El síntomaculminante,
el quecaracterizaba la
enfermedad,
era una gran excitaciónnerviosa,
por lo que el enfermo no
podía
permanecer en ellecho,
buscaba todas las
posiciones,
recorría todos los ámbitos de lacasabuscando inutilmente un
punto
de reposo.Otro de los síntomas era un dolor lancinante en el hue
)—
nio tenaz. El
aparato
respiratorio,
á lapercusión
y auscul
tación,
sepresentaba normal,
y sinembargo,
se
quejaban
de
opresión.
Lalengua
se conservabalimpia,
nohabía
vómitos ni
diarrea,
elapetito
enalgunos
sepresentaba
normal,
en otrosdisminuido,
pero de todos modos
las
fun cionesdigestivas
seefectuaban
conregularidad.
La
temperatura 37°,
elpulso
frecuente,
pequeno,
nervioso. La ideación normal.
• Este estado
en mayor Ô menor escala duró por
espacio
de dos meses; unos curaron para volverárecaerá los
8
día1;
otros
permanecieron
estacionarios
en el mismogrado
de
excitación
y dolorepigástrico;
losmedicamentos
solo obraban en el momento de
tomarlos,
para volver el mal una vez
eliminados.
Hasta entonces la enfermedad solo atacaba á los adul
tos de ambos sexos sin causar una sola
víctima,
pero al finde Julio empezaron á ser invadidoslos ninos de 4 a 11 arios
con los mismos caracteres que los adultos
parairse agravan do
rápidamente,
tanto que en el término de 36 horasmu
chos eran
cadáveres.
Losprimeros
síntomas de la enfermedad eran, como hemos
indicado,
excitación nerviosa y dolo res en elepigastrio;
á las pocas horas seagravaba
la escena, aumentando la
agitación;
losenfermitos
sequejaban
de cefalalgia violenta,
presentábanse vómitos,
ydesarrollábase
álasdoce horas un cuadro de
convulsiones, opistótonos,
salto de
tendones,
rigidez
en la nuca, contracción tetánica de lasextremidades;
lapupila
contraida yluego
dilatada
deltodo,
permaneciendo
losojos
abiertos éinsensibles
á la luz. Losenfermitos daban
gritos
ahogados,
perdían completamente
el
conocimiento
ypresentábase
hemiplegia.
quedando
in móviles ypercibiéndose
solo surespiración estertorosa;
absoluta
imposibilidad
detragar
alimento nimedicamento
alguno,
escapándose
la saliva por lascomisuras
labiales y al fin acabando este terrible cuadro con la muerte á las-( 31
)-treinta y seis 6 cuarenta y ocho
horas.
Latemperatura
permanecía
desde elprincipio
inferior á lanormal,
solo elpulso
es el que sepresentaba agitado
y frecuente: 120á 130pulsaciones.
Este cuadro serepitió
en unnino,
otro y otrohasta el número de 7 en ocho días.
Algunos
nopresentaron
el mal contantaintensidad;
faltaron los fenómenos
convulsivos
y lacefalalgia,
pero siendo
grande
la excitación y el dolorepigástrico,
extendién
doseéste por elraquis
ydesapareciendo
en el enfermito losmovimientos
voluntarios,
quedando
paralizados
completa
mente;
sus facciones cambian deaspecto,
parecen embobados,
sinpoder
articularpalabra
y solodespués
dealgu
nas semanas manifiestan su
voluntad
por medio degritos
guturales.
Ladefecación
y la micción se efectuan involuntariamente.
Entretanto van
menguando
en número los atacadosadultos.
Algunos
sehallan curados deltodo,
en otros permanece
estacionado
elmal,
pero con los síntomasprimitivos
muyligeros,
conservando
sólo eldecaimiento
general
y eldolor del
epigastrio,
pero tambien menos acentuado.Así transcurren unos
quince
días;
el número de enfermos oscila entre 10 ó
12,
y éstos en camino de convalescencia,
cuando deimproviso,
sin causas atmosféricas ni de otra índole quepuedan explicarla,
sepresenta
á fin deAgosto
otrarecrudescencia
en laepidemia,
con caracteresverdaderamente
aterradores,
no por elnúmero,
sino por lagravedad.
Losatacados
caeb. heridos. como por el rayo,unos en el huerto ó campos durante su
trabajo,
otros hablando
tranquilamente
con susamigos
en sushabitaciones
en las
calles,
y otros por la nochedurmiendo
Todos conlos mismos
síntomas;
el individuo cae al suelo sinconoci
miento,
se transforman lasfacciones,
dágrandes gritos
guturales,
sepresentan
convulsionesintensísimas,
necesi
-(.32
)-de la
boca,
sepresenta
á las pocas horashemiplegia,
elenfermo se calma del todo y muere con
agonía
lenta pero
horrorosa.
En elespacio
de veinte y cuatro horas muerendos,
á los dos días otros tres hastallegar
alnúmero de
ccho en una
población
de 200habitantes,
pues ha dismi nuído el número de
éstos,
ya por lamortalidad,
ya porque los vecinospudientes
hanabandonado,
siguiendo
el consejo
delmédico, aquel pueblo
maldito.Este es el estado actual de la
epidemia,
(1)
habiéndose
acudido átodos los medios que la ciencia
aconseja
para
com
batirla,
pero todos hastahoy
han sido inútiles. Solo se ha obtenidoalgun
resultado con la medidaextrema de hacer
abandonar la
población
a las personaspudientes,
por lo quemás de un centenar se han trasladado ya á dos horas de dis
tancia ó sea á los
balnearios
de aguassilicatadosódico—sul
furosas de Musa y
Travesera, Senillés,
y áPuigcerdá
ySeode
Urgel,
ofreciendo laparticularidad
de que una vez libres de la influencia de la atmósfera deletérea deAransa, rápi
damente se sienten
bien,
y sialguno,
yacompletamente
sano, vuelve á sus
lares,
el mal seapodera
otra vezrápida
mente de
él.
Se observó que los
sugetos
atacados másgravemente
y que han
'muerto
han sido las personasnerviosas,
exci tables y con antecedentes neurasténicos.En
primer
lugar los
ninos,
en los cuales el sistema nervioso domina átodos los
demás;
éstos todos han muertorápidamente.
Luego
lasmujeres
.quepreseiltaban
amenudoataques
dehisterismo
y los hombres adultos detemperamento
nerviosoque
les asimilaba
á lasmujeres histéricas,
dando tambiensu
contingente
lostipos
degenerados
ó
cagols,
que tantoabundan en estas
montanas,
conpoco desarrollo
cerebral,
que en último resultado no es másque una forma de dese
quilibrio
nervioso.(1) Octubrede 1896.
-( 33 )—
Tanextrana
epidemia,
que no debe calificarse degri
pal
comoalguno pudo
suponer, diólugar
á diversos comentarios que no tomaron carácter de discusión porque dificil
mente
llega
á discutirse conprovecho
de las cosas pococonocidas y solo por referencia.
Quedó
suspenso todo debate hasta que el senorMaresch
remitiese detalles
pertinentes
álaindagación
de las causasinfluyentes
tanto en lapoblación
como en elindividuo,
loscualesse le
pidieron.
DICTÁMENES LIBRADOS Á PARTICULARES
Tampoco
en el finido ario haquerido
entender la Academia en diversidad de
drogas, específicos
é invenciones deindustriales
que han solicitadoinforme,
con elprobable
finde que las conclusiones
(más
Ó ménosambiguas)
del mismo, sirviesen de reclamo comercial.
Ocupándose
tan solo deobjetos
ó medicamentospresentados
por personas facultativas,
informó favorablemente unaparato
ideado por elDr. D.
Agustín
Bassols yPrim,
titulado: Analizador volumétrico del aire
expirado.
Una comisión nombrada al efecto vió funcionar elaparato,
anotó cuantasexplicaciones
sobre su uso
proporcionó
el Dr.Bassols,
ypudo
confirmarasí la utilidad del mismo para
coadyuvar
aldiagnóstico
ypronóstico
dealgunas
enfermedades losórganos torácicos,
constituyendo
además un buen indicador de la actividadquímica
delorganismo,
de facilísimaaplicación.
El Sr. D. José M.a
Andreu,
médico de Cherta(provin
cia deTarragona),
presentó
una instancia para que laAcademia ensayasey diera informe deun remedio desuinven
ción contra la difteria.
Según
relación de dicho senor, en-( 34
)-ocurridas en
pueblos
de sujurisdicción,
en las que observóun total de2.000
diftéricos,
el uso desu remedioaplicado
con
pincel
en lafaringe,
cadahora,
desde elprincipio
dela enfermedad durante uno ó dos
días,
había combatido conéxito la
afección;
declarando empero queen el crupnopuede
utilizarse porque la
aplicación tópica
no es factible. Afirmaque la acción del
tópico
no es microbicidarespecto
al bacilode
Kleps-Lcefler,
pero que loadormece,
yaniquila
supropagación
yreproducción,
porque ellíquido
se absorve hasta lo
profundo
de lamucosa, sin cauterizarla. Presentómuchos certificados de los Párrocos y Alcaldes de los
pueblos
de
Cherta,
Mora deEbro,
Pauls yAlfara,
aseverando que delos enfermos tratados por el Sr. Andreu no había fallecido
ninguno.
Los deseos del Sr. Andreu eran de que la Academia ensayase el remedio en un gran número dé casospara convencerse desu gran
eficacia,
pero resultando queel
tópico,
cuyacomposición
noquiso
divulgar
suautor,
sedebía considerar como remedio secreto
(aunque
noempí
rico)
no se atrevió á asumir laresponsabilidad
deprobarlo
en
ningún
caso, máxime estando confirmados la utilidad deotros medios como el
tópico
de Lcefler y lasinyecciones
desuero
Roux,
sancionadas por todo el mundo. En tal conflicto,
porque considerando la buena intención del inventory su base
científica,
resultabasimpática
la idea de animarloen su empresa
humanitaria,
sin caer en elpeligro
de recibir
alguna decepción
en el terrenoclínico,
la Academiaresolvió estudiar la acción del
tópico
Andreu sobre el bacilo diftérico in vitro ypracticando experiencias
delaboratorio,
las que fueron confiadas al numerario por la Sección deVe
terinaria y
reputado
bacteriólogo
Sr. Turró.He
aquí
el resultado y las conclusionesadoptadas
por laCorporación:
1.0 Adicionado el
Antidiftérico
Andreu
al caldo á35 )
2.° A la dosis de 1 por 35
aproximadamente
y á latemperatura
de38°,
mata al bacilo en elespacio
de 3 horas.3.° En un tubo inclinado
germinado
con dicha especie,
lo mata en cortos momentos si se le bana con el antidiftérico
pudiendo equipararse
su acción á la deltópico
Lcefler.
4•°
Levantandoplacas
diftéricas en la vulva de cobayas
que se tocan con torundas dealgodón empapadas
enel
líquido
antidiftérico,
amarillean y se coarrugan saltandocon mayor
rapidez
que en los animalestestigos
del experimento. Este efecto es todavíamás
ostensible
en,la
boca depichones,
cubierta en su base y comisuras de membranasdiftéricas,
si se lairriga
durantelargo
rato con el antidiftérico de referencia.
-En. suma: los
experimentos
de laboratoriolegitiman
elensayo de ese
líquido
en el tratamiento de la difteria usadoC-Cmo
